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Utilizan “violentómetro” para medir grados de conductas en niños


10/02/15.- En la Escuela Primaria «Rafael Betancourt», los directivos y maestros están utilizando el “violentómetro” con la idea de que sus alumnos conozcan los tipos de conductas que existen desde las más graves hasta las más sencillas y el puntaje que lleva cada una de ellas.

Tatiana Velázquez Arellano, directora de la escuela primaria, manifestó que es importante que los alumnos vayan conociendo la gravedad de cada una de las situaciones que se denuncian por parte de la persona que recibe alguna agresión.

“Hace unas semanas recibimos el violentómetro con la idea de hacerlo llegar a los niños para que conozcan que a veces hay bromas que aunque son hirientes pueden ser un inicio para lo que se conoce como bullying”, aseguró la directora del plantel.

 

Diversas conductas

Entre otras conductas que se marcan dentro del «violentómetro» destacan las bromas hirientes, chantajes, intimidar, amenazar, prohibir y controlar amistades, además de conductas más graves como patear, cachetear, golpear o amenazar de muerte.

Indicó que afortunadamente en el plantel educativo no se han tenido conductas graves entre sus alumnos, pero se lleva un registro por parte de los maestros de incidencias, con la idea de conocer cada una de las conductas de sus alumnos.

De hecho siempre el personal docente está muy atento a ver ese tipo de problemas que se pudieran presentar con sus alumnos, con el propósito de darles pronta atención y evitar que el asunto se ponga más grave.

 

Hay vigilancia

Todos los días se dialoga con los niños y se tienen guardias en el recreo, en donde los maestros portan un chaleco que los hace notar entre la población estudiantil, para que sepan que están dando rondines en la escuela.

Por ejemplo a la hora de recreo cuando los niños salen a tomar sus alimentos y juegan un rato, los maestros están pendientes de las conductas de los menores para evitar que se presenten roces entre ellos.

En una semana se presentan por lo menos 1 o 2 casos en donde los niños incurren en alguna conducta que no es la más correcta, se dialoga con ellos y con los padres de familia para evitar que vuelvan a reincidir.

Por su parte el supervisor escolar, Reinaldo Treviño González, señaló que en las escuelas que están a su cargo no se tienen problemas graves en donde se vean involucrados los alumnos en conductas antisociales.

Sin embargo los directores siempre están pendientes, para evitar que se registren problemas en el interior de las escuelas con los alumnos, además de que es importante la coordinación que existe con los padres de familia.

Por: Juan Carlos Jiménez

jimenez@elbravo.com.mx

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