11/08/2016 – Atrapados entre las tendencias antiglobales de su candidato a la presidencia y los grandes nexos de su estado con México por tratados, los republicanos del Congreso de Texas están en una línea política truculenta al hablar de renegociar el Tratado de Libre Comercio (TLC, en México).
Postura de Trump
El nominado republicano a la presidencia, Donald Trump, llamó al tratado “un desastre” y sugirió renegociar el pacto en un discurso del lunes pasado en Detroit. A menos que logremos un mejor trato, dijo, EU debería salir de ese acuerdo de 22 años que bajó las barreras arancelarias entre EU, México y Canadá. Los texanos más conservadores también quieren abandonar el tratado. La plataforma de 2016 del Partido Republicano exige “el retiro inmediato del Tratado de Libre Comercio”.
Texanos en contra
Pero cuando el periódico The Texas Tribune cuestionó a cada uno de los 27 miembros republicanos de la delegación del Congreso en Texas, ninguno se unió a Trump en su idea de renegociar el tratado. Ninguno aceptó ser entrevistado. Tres respondieron de manera escrita. “El TLCAN es el responsable de haber incrementado el intercambio entre Texas y México en casi 110 por ciento desde el 2004”, declaró el representante Will Hurd -republicano de San Antonio- en un comunicado. “Texas va a la cabeza en la nación en exportaciones y beneficios gracias a los acuerdos internacionales que ponen los bienes y servicios de Texas en las manos de más clientes”, explicó el representante Lamar Smith, republicano de San Antonio, quien votó para ratificar el TLCAN en 2003. En 1991, un año antes de que el presidente George H. W. Bush firmara el TLCAN, Texas exportó a México 15.5 miles de millones de dólares en bienes, de acuerdo con el Instituto Internacional de Comercio del Centro Texas. Para el 2015, eso se había sextuplicado. El año pasado, la industria de exportaciones de Texas dio empleo a 1.1 millones de personas, la mayor de todas en el país, según reporta el Departamento de Comercio de EU. “TLCAN no es una palabra sucia en Texas”, comentó el senador de EU, John Cornyn -asistente del líder nacional del partido- en una entrevista en marzo para el Instituto Brookings.
Tratados internacionales
Sin embargo, la opinión pública del partido republicano de Texas sobre tratados internacionales se ha agriado. Aunque no hay una encuesta reciente que haya sondeado la popularidad del TLCAN específicamente, en una encuesta de junio del 2016 conducida por el Proyecto de Políticas de Texas de la Universidad de Texas en Austin, se observó que el 51 por ciento de los republicanos del estado perciben los acuerdos del tratado como desfavorables, comparado con apenas el 17 por ciento que los apoyan. Scott Lincicome, investigador adjunto del Instituto Cato, comentó que la opinión pública de los acuerdos de comercio con frecuencia va ligada a una “ceguera partidista”. A algunos republicanos de Texas puede no gustarles el TLCAN en parte porque fue ratificado cuando el esposo de la actual candidata demócrata a la presidencia Hillary Clinton era presidente, explicó el director de comunicaciones del Partido Republicano de Texas, Michael Joyce. Clinton también era secretaria de estado durante las primeras negociaciones de la Sociedad Tras-Pacífica, aún pendiente de ratificar.
Agencias