3/12/2017 – Quito.- Un sismo de magnitud 6.0 sacudió la costa de Ecuador, según cifras preliminares, en la misma zona donde un temblor mortal dejó cientos de muertos el año pasado.
«Al momento no tenemos víctimas que lamentar, ni daños materiales considerables»
Las autoridades informaron que no había riesgo de tsunami y llamaron a la calma.
El presidente Lenín Moreno dijo que no hay informes por el momento de víctimas o daños mayores por el movimiento, que se produjo poco después de las 6:00 horas de hoy y se sintió en 12 provincias de todo el país.
«Hermanos manabitas, estamos pendientes de ustedes. Sismo de 6 grados. Al momento no tenemos víctimas que lamentar, ni daños materiales considerables. He dispuesto instalar #COE provincial. Mantengamos la calma e informémonos por canales oficiales. #Temblor», escribió Moreno.
El presidente añadió que los primeros reportes «ratifican la no existencia de víctimas. Proyectos de reconstrucción en perfecto estado. No se registran daños estructurales en represas. Se está trabajando en subestación Tosagua para restablecer energía eléctrica. Seguimos monitoreando».
La Secretaría de Gestión de Riesgos expresó en un comunicado que el sismo se sintió en las provincias de Manabí, Guayas, Los Ríos, El Oro, Santo Domingo de los Tsáchilas, Pichincha, Chimborazo, Imbabura, Esmeraldas y Tungurahua.
La secretaria de Gestión de Riesgos, Alexandra Ocles, declaró a la televisión «Ciudadana» que, hasta el momento, no hay información de daños estructurales, aunque sí se produjeron algunas fisuras leves en ciertas viviendas.
El Instituto Oceanográfico de la Armada informó de que el sismo no reúne las condiciones para generar un tsunami en las costas ecuatorianas ni en la región insular de Galápagos.
El Sistema Integrado de Seguridad (ECU 911) avanza en la reunión de información de posibles daños causados por el sismo en la provincia de Manabí, una zona de atracción turística en el país andino.
El 16 de abril del año pasado, un terremoto de magnitud 7.8, uno de los más fuertes de la historia de la nación andina y que afectó zonas de la provincia de Manabí y al sector sur de su vecina de Esmeraldas, causó más de 670 muertos, miles de afectados y millonarias pérdidas.
Agencias