14/07/2015 – El jefe del Centro Regional de Desarrollo Educativo (Crede) de Matamoros, José Luis Cuéllar Ornelas, advirtió ayer que los maestros que se resistan a la evaluación que contempla la reforma educativa serán removidos de los salones de clase para que desempeñen otras funciones educativas, esto de acuerdo a lo que contempla la Secretaría de Educación Pública (SEP), y consideró que el resistirse a la evaluación denota inseguridad de sus conocimientos, además de reflejar “problemas de autoestima”.
“La reglamentación por el momento es muy clara, negarse a ser evaluado puede ser motivo de que la autoridad utilice otros medios para aplicar ese resultado, de que el maestro se negó a la evaluación;
en primer término se habla de poderlo utilizarlo en otra labor, porque todavía tenemos en las escuelas muchas funciones que no están cubiertas en nuestro sistema educativo; aquí en México no existe la figura del auxiliar docente, el maestro de grupos numerosos está en un grupo de condiciones difíciles”.
Dijo además de que “en las escuelas primarias no existe tampoco un encargado de la disciplina que pueda ser orientador a la vez; los muchachos de sexto grado ya necesitan atención especial, hay muchos aspectos que se pueden cubrir en las escuelas y que parecieran ser administrativos pero son también de área docente; a los alumnos de bajo rendimiento no hay quien los atienda; tendría el sistema educativo la oportunidad de poder abrir otras funciones dentro de la escuela”.
“Problemas de autoestima”
El profesor Cuéllar Ornelas, destacó que es necesario leer más sobre esta ley educativa, “el que tiene miedo de ser despedido quizá por problemas de autoestima calcula que no va a poder con una evaluación; se los he dicho, que no creo que un maestro que haya estado por diez años trabajando en un grupo, con libros de texto, con programas, asistiendo a seminarios, a cursos de superación, no creo que no vaya a poder con una evaluación”.
Más de 3 mil 400 serán evaluados en el Estado
Destacó que en el municipio de Matamoros ya están convocados cerca de 600 maestros para aplicar a partir de septiembre -y otros 600 en febrero de 2016- de 3 mil 436 en todo el Estado por etapas, de todos los niveles, desde inicial, especial, preescolar, secundaria general, técnica; quienes tendrán que empezar a prepararse y registrarse, y enviar sus evidencias “porque en las muestras pedagógicas que hemos presenciado realmente los maestros hacen muchos trabajos que pueden usar para demostrar que están ejerciendo el programa de estudios y que están evidenciando que los alumnos están trabajando sobre ello”.
Añadió “y luego enfrentarse a un cuestionamiento también por vía internet de modo que serían evaluados, “el gobierno y la Secretaría de Educación Pública en el Estado han hecho un último ofrecimiento de quienes presenten y acrediten en la primera ocasión el examen podrían tener hasta un 35 por ciento de incremento en su salario, y eso es motivante y puede ser una de las finalidades del maestro que trabaja muy bien, que su labor sea evaluada y estimulada”.
Dijo que los maestros que no están de acuerdo con ser evaluados es porque “no se sienten capaces para enfrentar una evaluación, por lo que es fundamental informarse más de cual es la finalidad, “que en el caso de los maestros es de que conozcan sus fortalezas y sus áreas de oportunidad, los que nos hemos enfrentado a un proceso de evaluación, en esta semana va a fluir más información, cuales son las etapas, si va a ser por grupos o de forma gradual, esto cada vez va a ir quedando más claro, y al estar claras las condiciones de evaluación obviamente que va a despertar más confianza y más si se precisan que estímulos económicos pueden recibir”.
La coordinadora académica, Lina Leticia Rodríguez Treviño, comentó que está de acuerdo con la evaluación, que esta sea “congruente, a lo que estamos ejerciendo cada uno, no una evaluación fuera de contexto totalmente”.
Considero que “son más las desventajas en la evaluación porque la idea es que el gobierno federal centraliza los sueldos; entonces quiere quedarse con unos poquitos -maestros-, nos quiere dividir y aprovechar que hay muchas situaciones de desagrado entre muchos maestros, pero creo que este es el momento para unirnos para levantar este barco en el que estamos todos”.
Abelardo López Guajardo