29/09/15.- Selena Gomez no habla más de Justin Bieber. A los periodistas a punto de entrevistarla nos advierten que no se permitirá tocar temas personales.
Sin embargo, durante los 20 minutos de conversación ninguno necesitó visitar ese lugar oscuro. A sus 23 años, Selena nos cautiva no solo con su belleza y carisma, sino con su madura visión de la vida.
Ha crecido frente a cámaras pero eso, a diferencia de Lindsey Lohan, Miley Cyrus o Demi Lovato, no la ha desviado nunca del camino del sentido común. El secreto es su madre, nos confiesa.
La tuvo a los 16 años y ha trabajado toda su vida para darle una mejor calidad de vida. Ella también le dio aun un mejor regalo: llenó su vida de arte.
Influyó en mi desde que tengo uso de razón. Vemos películas juntas, llenó mi casa de música de Janis Joplin, de los Rolling Stones, me hizo explorar géneros como el hip hop. Ella entiende todo, afirma.
Has estado frente a las cámaras durante los últimos 10 años. ¿Cómo ha sido crecer en la televisión?
Es extraño. Todos tienen un falso concepto de lo que es ser una estrella infantil, como si todas nos hubiéramos visto forzadas a serlo. Creo que tanto productores como guionistas tienen esta idea de que nuestros padres nos obligaron. Para cuando iba a cumplir 18 yo ya estaba desesperada por demostrar que tengo voz propia, quería mostrar más. No me gustaba que las personas pensaran que tenía una sola dimensión, cuando habían muchas facetas dentro de mí. Yo recién estaba empezando.
En “Hotel Transilvania 2” interpretas a una madre.
¡Y es la segunda vez en menos de un año! Y ha sido genial. Este [en “Hotel Transilvania”] es un mensaje profundo de lo que es ser mamá. Es acerca de tener a alguien en tu vida que es diferente. Este mensaje va más allá de los monstruos y humanos, tiene que ver con la vida real. Creo que es un filme especial para hablarles a los niños acerca de ser diferentes y aprendan qué significa.
¿Te ves como una actriz en el largo plazo?
Creo que por el momento sí. Hoy en día no quiero promover nada que no me importe. Yo elijo los trabajos con base en lo que es mejor para mi. La música es buena para mí ahora, porque puedo expresarme musicalmente, pero hace cinco años decidí dedicarme a actuar y solo quiero ver qué pasa. Mi próximo álbum (que se lanza el 9 de octubre) es de lo más increíble, nunca había estado tan orgullosa de un disco.
¿Existe alguna actriz a la que te quieras parecer o que te sirva de inspiración?
No hay ninguna a la que quiera emular, pero me encantan todas, desde Meryl Streep hasta Rachel McAdams. Creo que sus elecciones nunca son similares. Rachel hizo comedia, ‘Thriller’, drama y romance, por ejemplo. Ellas se reinventan a sí mismas para cada personaje. Admiro eso, nunca quisiera interpretar el mismo personaje una y otra vez en el cine.
¿Te sientes un modelo para las chicas más jóvenes?
Honestamente, sí, y es el mejor regalo. No soy perfecta, creo que la gente ha visto que no lo soy. Pero trato de mostrar cómo me mantengo firme, cómo es que voy a tratar de no decepcionarlas. No voy a dejar que nadie me diga que no soy lo suficientemente buena o que no debería hacer esto o aquello. Trato de esforzarme lo más que puedo por las chicas.
Hoy en día no se puede decir que haya alguna actriz favorita querida por todo Estados Unidos. ¿Te gustaría serlo?
No estoy tratando de ser alguien más que yo misma. Lo entiendo, el poder de las redes sociales es tal que tenemos a chicas tratando de seguir a otras, yo misma lo hago. Es algo tóxico. Soy una mujer, me gusta mi sensualidad, me encanta sentirme sexy, pero cuando se trata de mi vida personal, soy normal. Hay un deseo de querer ser sexy todo el tiempo, pero no va conmigo.
¿Cómo haces para mantenerte centrada en un mundo como el de Hollywood?
Mi madre. Ella ha dado su vida entera por mí, me tuvo a los 16 años y ha estado trabajando para darme una vida mejor. Ella es la única persona que me dice “no” cuando todos los demás me dicen ‘sí’.
En una entrevista dijiste que fue ella la que te animó a que hicieras un papel en la polémica película “Spring Breakers”. ¿Es cierto?
Sí, ella es una persona que entiende el arte. Se trataba de un papel que me iba a demandar mucho artísticamente. Pensé que sería emocionante, que aprendería. Además, me encanta James Franco. Obviamente, no hice nada muy loco durante la película. Todo se trató de exigirme artísticamente y hacer algo diferente.
Aunque tienes raíces latinas, no haces el doblaje en español en “Hotel Transilvania 2”. ¿Te gustaría haberlo hecho?
Sería un sueño. Hace un momento hice una entrevista en la que el periodista me preguntaba en español y yo respondía en inglés. Es algo que a veces necesito, me hace sentir como cuando era niña. En cada álbum que lancé puse una canción en español. Hablarlo es algo que quiero hacer más seguido.
¿Cuál es el momento que más recuerdas al ir al cine a ver animación?
Creo que lo primero de animación que vi en el cine es “Rugrats”. Fui con mi mamá. Es emocionante y por eso me gusta hacer películas, porque todavía me emociono cuando voy al cine. Me gusta ver una película en pantalla grande, puedes hacerlo en tu casa, pero ir al cine es todo un evento.
El Universal/El Bravo