Se mata en volcadura


La víctima fatal tenía desempleado, pero en ocasiones lo contrataban para llevar autos y venderlos al interior del país.

25/05/15.-Un residente de la colonia Obrera identificado como Sandro Castro Cervantes, con domicilio en la calle Decoradores número 98, murió al volcar la camioneta Van en la que viajaba, accidente registrado cuando regresaba de la ciudad de Tampico, a donde acudió a recoger la camioneta y en el trayecto ocurrió la fatal volcadura.

Sandro, tenía siete meses que había quedado desempleado, pero en ocasiones lo contrataban para llevar autos para venderlos al interior del país y que el viernes pasaron por él para que fuera a la ciudad de Tampico, en donde recogería una camioneta Van que se había descompuesto pero que ya estaba arreglada.

La última llamada
Fue el sábado por la mañana que Sandro hizo lo que sería la última llamada a su mujer María Guadalupe Becerra a la que le pidió que prendiera el asador, pues ya venía en camino, pero horas después otra llamada de una persona desconocida terminó con su alegría, pues le dijeron que Sandro se había accidentado y que se lo habían llevado para su atención médica al Hospital General de San Fernando.
Debido a que en ese lugar no contaban con los aparatos adecuados, se le trasladó a Matamoros para internarlo en una clínica del fraccionamiento Victoria, en donde llegó ya sin vida.

Sobrino
El ahora occiso al momento del accidente era acompañado por su sobrino Aldair Castro, de 17 años de edad, quien resultó sólo con golpes leves en este percance registrado sobre la carretera Matamoros-Ciudad Victoria.
Personal de la agencia primera del Ministerio Público a cargo del fiscal Homero Hernández Ochoa, tomaron conocimiento de la muerte del infortunado chofer, ordenando que el cuerpo fuera trasladado a las instalaciones del Servicio Médico Forense para la práctica de la autopsia de ley.
Fue Jorge Castro Cervantes, de 48 años de edad y hermano del ahora occiso, quien acudió ante el fiscal primero para solicitar la entrega de los restos mortales de Sandro para darle cristiana sepultura.
Jorge, quien habita en la calle Jornaleros número 57 de la colonia Obrera, dijo que él pasó el sábado por la mañana por la casa de su cuñada María Guadalupe Becerra y le preguntó por Sandro y ella le comentó que ya le había hablado y que le dijo que prendiera el carbón por que ya venía de regreso, pero después le llamó para darle la noticia de que su hermano se había accidentado y cuando iba para la clínica, le avisaron que ya había muerto, por lo que acudió a la agencia primera del Ministerio Público para solicitar la entrega de los restos mortales de su hermano, señalando que desconoce el lugar en donde se registró la volcadura.

Jesús Torres Salas

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