28/05/2016 -Dieciséis familias centroamericanas fueron arrestadas en las últimas dos semanas en Houston, Atlanta, Charlotte y Dakota del Sur, en lo que parece ser el reinicio de las llamadas “redadas” u operativos para sacar del país a personas que supuestamente ya no tienen recursos de asilo y que entraron por la frontera a partir del 2014.
Detenciones
Aunque no ha habido aún confirmación oficial de este hecho, así lo reportaron los abogados que trabajan “pro bono público” en centros familiares de detención en el sur de Texas, donde están la mayoría de las madres con hijos que han entrado al país en los últimos dos años, provenientes de Centroamérica. Kathryn Shepherd, directora legal del proyecto Pro Bono CARA en el centro de detención de Dilley, en Texas, dijo por medio de un e-mail y posterior conversación telefónica que la mayoría de estas madres con hijos menores, fueron arrestadas expresamente en sus hogares o regiones de residencia. Las dieciséis familias llegaron a estos centros en las últimas dos semanas. “La forma fue muy similar a lo ocurrido a finales de diciembre o principios de enero”, dijo Sheperd. “Una chica de 15 fue arrestada tomando el autobús, y luego fueron a su casa para arrestar a la mamá. Los agentes preguntaron directamente por ellos y en muchos casos, forzaron su entrada a los hogares con excusas”.
Deportaciones
Los abogados en los centros familiares de Dilley y Karnes, en el sur de Texas, lograron hablar con las madres, pero al menos en un caso les fue imposible hacer algo para impedir la deportación de una madre guatemalteca y su hija de 14 años. “Esta familia tenía una orden de deportación, creemos que porque tuvo un mal abogado y nosotros avisamos a las autoridades de que presentaríamos una apelación al día siguiente con la Junta de Apelaciones de Inmigración”, dijo Shepperd. Sin embargo, madre e hija fueron deportadas a las 5 de la mañana, antes de que abrieran los tribunales y los abogados pudieran presentar documentos. Las demás familias están aún detenidas en estos centros y estos abogados y otros voluntarios van a intervenir para asegurarse que realmente ya no hay posibilidades legales. Hace dos semanas un medio publicó informaciones provenientes de documentos filtrados en los que se detallaba un renovado operativo para deportar a madres e hijos que ya hubieran tenido “su oportunidad en corte”. Posteriormente, portavoces de DHS dijeron a varios medios de comunicación que: “Las operaciones actuales son una continuación de las que el secretario Johnson anunció en enero y marzo. Insistimos en que estas operaciones se limitan a los que fueron detenidos en la frontera después del 1 de enero de 2014, un tribunal de inmigración les ha ordenado salir, y no tienen pendiente de apelación o reclamo pendiente de asilo u otra ayuda humanitaria bajo nuestras leyes”.
¿Que pasó con las redadas?
La primera ronda de “redadas” realizada a finales de diciembre y principios de enero terminó con el arresto de 121 familias -madres e hijos- que supuestamente, según el gobierno, no tenían más recursos legales que perseguir. Sin embargo, dijo Shepperd, en el caso de las familias, al ser llevados a los centros familiares, pudieron recibir la ayuda de los abogados pro bono y hoy en día todos han sido liberados, excepto dos familias, apuntó la letrada.
Agencias