Ma. Teresa Medina
15/01/16
Mejor batirse en retirada que retirarse batidos
Las ambiciones de llegar a la gubernatura de Tamaulipas, que dudo hayan sido ansias desbordadas tirándole a ganas locas (aunque hay de todo en la viña del Señor), parecen finalizar hoy viernes al firmarse -según trascendió- un pacto de unidad, cuyo testigo principal será el dirigente nacional tricolor Manlio Fabio Beltrones.
Pero antes de que el priísmo tamaulipeco conozca a su candidato de unidad se emitirá desde el DF, como corresponde, la convocatoria oficial, que recaerá desde luego en el prospecto con mayor posicionamiento político y social, tanto por antecedentes, capacidad y prestigio.
Personaje que será enviado a la trinchera electoral con la certidumbre de que realizará un papel estratégico y relevante, y cuya credibilidad deberá superar cualquier propuesta y expectativa, incluyendo los proyectos de los opositores que hasta el momento continúan sin trascender en el ánimo de los ciudadanos, mucho menos en sus conciencias.
Excepto los aspavientos peleoneros y pueblerinos que se traen los alcaldes Carlos Canturosas y Leticia Salazar con el senador Francisco García Cabeza de Vaca.
Alharacas que se esperan queden superadas pronto, no sólo porque no hacen gracia ni aportan algo a la entidad sino porque de insistir en sus pugnas lo recomendable sería mejor batirse en retirada que salir batidos.
Recordemos que la sociedad en su conjunto nada desea saber de rupturas y trifulcas, cuyos efectos no sólo no son sinónimos de democracia sino que suelen ser castigadas severamente por los votantes en las urnas.
Protagonistas del pacto
Volviendo con el documento inicial, este deberá rubricarse sin duda alguna por el primer priísta de la entidad Egidio Torre Cantú, seguido del delegado del CEN tricolor Fernando de las Fuentes Hernández y el propio presidente del PRI estatal Rafael González Benavides.
Se infiere que los protagonistas firmantes del pacto de marras serán los aspirantes locales encabezados por Alejandro Etienne Llano, Enrique Cárdenas del Avellano y Ramiro Ramos Salinas.
Mientras que por el lado de los tamaulipecos con más trayectorias foráneas, estarían signándolo Marco Antonio Bernal, Mercedes del Carmen Guillén Vicente, Alejandro Guevara Cobos (quizá Edgar Melhem Salinas) y Baltazar Hinojosa Ochoa.
Así pues se perfila un fin de semana intenso para el partido en el poder, con un esbozo que anuncia un año electoral donde los principales partidos de oposición no lograrán pintar sus colores en el mapa político, al igual que los independientes que no pocos comentaristas ya califican de puro desecho y casi de infraseres.
Precisando que este espacio no ve ni considera de ninguna de esas dos formas a ningún ciudadano que por su propio derecho se registre a contender por un cargo de elección popular.
No obstante, las posturas aliancistas entre PAN y PRD no emocionan a nadie, y lo que es peor: dan la impresión de no proponer absolutamente nada, salvo burdos intentos de calambres hacia un PRI que le ha apostado a la unidad, como bien lo expresara en su momento el alcalde de Victoria, Alejandro Etienne Llano.
Fuera de ahí, las señoras y los señores de los partidos opositores sólo manifiestan aires de suficiencia que, hasta donde se sabe, nunca han ganado una sola elección en el mundo.
Y si bien es cierto que la política está plagada de numeritos teatrales, los cuales suelen ponerle a estos procesos electorales algo de sabor, también es cierto que Tamaulipas con el Gobernador Egidio Torre Cantú ha luchado durante toda su administración para que la sociedad recupere la normalidad de antaño, encauzando a la entidad por una ruta ascendente en todos los rubros sociales y económicos.
Prioridades que ha logrado, aunque siempre faltarán cosas por hacer, sin dejar de comparar el antes del uno de enero de 2011 con el actual 15 de enero de 2016.
Una diferencia notable y paralela a una transformación de mejor vida para todos, y una cada vez más grande esperanza que reconoce que este sexenio sentó las bases de otro propicio, sin las dificultades ni las alteraciones que el actual tuvo que librar en todos los frentes.
Seguramente este escenario será una de las grandes oportunidades para que el PRI se sostenga en el poder, ratificado por un electorado que comprobó el cambio por los pasos mayores que se dieron, y en cuyo proyecto no se supo bien a bien que los políticos opositores participaran.
¡Buen día y feliz fin de semana!