Ma. Teresa Medina
3/02/17
Lo de la invasión, ni yendo a bailar a Chalma
El desmentido de la Secretaría de Relaciones Exteriores (SRE) contra la “revelación” que antier hiciera la periodista Dolia Estévez, confirmada por la agencia AP (Associated Press), de que Donald Trump habría amenazado a Enrique Peña con enviar tropas para detener “a los hombres malos de allá”, no frenará la percepción provocada por el efecto mediático.
Dicho de otra forma, ni yendo a bailar a Chalma revertirán el revuelo desatado por un reporte que, según la cancillería a cargo del “aprendiz” Luis Videgaray, “está basado en absolutas falsedades y con evidente mala intención”.
Y mientras Estévez y la influyente agencia noticiosa trascienden información de fuentes “confidenciales”, clásicas al filtrarse este tipo de sucesos, el país permanece confundido entre el sensacionalismo y lo real.
Situación agravada por la enorme crisis de credibilidad hacia el Gobierno de la República y quien lo preside.
La otra es que en tanto de este lado de la frontera niegan oficial y tajantemente las versiones de marras, del otro prevalece el silencio gubernamental. Nadie da la cara. ¿El que calla otorga?
Asimismo, el hecho de que de pronto diversos medios de Estados Unidos (como la cadena CNN) califiquen de falsas las versiones fortaleciendo el comunicado con el que Relaciones Exteriores fijó su postura, parece un acto endeble ante las afirmaciones de AP, un gigante de la información fundado en 1846.
Aun y cuando este flujo informativo haya sido sacado de contexto, habitual en esta actividad, debemos recordar, ya lo decía el miércoles, que Trump parece obsesionado por atacar militarmente a México desde su campaña electoral, pese a los matices que el gobierno mexicano imponga a esa eventual desgracia, importándole poco la inteligencia y reacción de un público incrédulo y mayoritario, harto de escuchar una realidad miope y deshilvanada.
A estas alturas en que ya nadie cree en nada ni en nadie, el Gobierno de la República comete de mala fe un grave error al delegarle a los medios la tarea de precisar “lo que se dijo realmente”, sin asumir directamente (como es su obligación) la explicación que merecen los mexicanos, intentando detener con un escueto y aislado comunicado un estallido mediático.
Y lo que es peor, sin apoyarse de la versión de los voceros de la Casa Blanca, cuyas intenciones maquiavélicas jamás complementarán nada, excepto continuar asestando humillaciones políticas y psicológicas al gobierno y pueblo de México.
Suicida política ficción que espera, eso sí, los avances del imperio que viene por todo, mientras aquí arrodillados esperamos. Al fin y al cabo, dirá un día Peña, ¿qué hubieran hecho ustedes ante esta crisis universal?
VICTORIA AVANZA A BUEN PASO
En medio del marasmo y confusión que a fuerza de declaraciones y acciones indefinidas pretende superar el Gobierno Federal, en Victoria se perciben avances concretos del ayuntamiento que preside Óscar Almaraz Smer, cuya intensa actividad le mete mucho optimismo y perspectiva a la población de que el estado anterior de cosas mejorará sustancialmente.
Las declaraciones del secretario del Ayuntamiento, Armando Núñez Montelongo, de que (apenas) en cuatro meses la nueva administración municipal ha logrado avances demandados por la sociedad, es una noticia verificable en los hechos.
El problema de la basura que tantas protestas suscitó, quedó prácticamente resuelto con el moderno sistema de recolección de desechos. Paralelamente ya hay resultados en pavimentación, bacheo y electrificación, así como en la recuperación de los espacios públicos que por falta de iluminación habían sido olvidados por la ciudadanía y el comercio ambulante.
Una tarea que ha requerido de parte de Almaraz y su equipo un compromiso que va mucho más allá de las acomodaticias ocho horas de trabajo, sin descansos de fines de semana y propuesto a fortalecer esa vinculación que la gente pedía con la autoridad local, transformando a buen paso a la capital de Tamaulipas en un campo de trabajo que ratifica diariamente un proyecto organizado y perseverante.
EMPRESARIOS RECONOCEN AL GOBERNADOR
En este orden de ideas tampoco pasa desapercibido el reconocimiento de los empresarios agrupados bajo las siglas de la Coparmex y la Canaco a los resultados que en materia de seguridad desarrolla el Gobernador Francisco García Cabeza de Vaca, generando en la Iniciativa Privada y en la propia sociedad la confianza de que los compromisos asumidos por el nuevo Gobierno de Tamaulipas se están cumpliendo, y que de forma paralela y simultánea al combate de la criminalidad se reconstruye el tejido y la cohesión social, derivando fuentes de empleos en el estratégico sector privado.
¡Feliz fin de semana!