Nuestros Columnistas Locales
OPTIMUS
Jorge A. Pérez
25/05/15
EL BRONCO
El sueño de muchos hoy está puesto en Nuevo León, piensan que las candidaturas ciudadanas representan su salida óptima a la falta de oportunidades en sus ambiciones personales.
Desde todos los partidos se escuchan las conjeturas personales de quien será el próximo bronco en cada municipio de Tamaulipas y también desde luego para la joya de la corona, el gobierno del Estado.
Algo si queda claro, el «chapulineo» terminará con esta opción que les brinda las reforma electoral, pues lamentablemente, lejos de abrir el espacio para quienes no tienen experiencia política, son los mismos militantes de todos los partidos políticos quienes aspiran hoy a abandonar las siglas para desde una supuesta aspiración ciudadana buscar algún cargo de elección popular.
Así que preparémonos para el éxodo de los que se sienten relegados, de los que siempre han aspirado, (lo cual no es malo), de los que nunca han podido acumular consensos, de los que nunca han podido llevar agua a su molino.
La esencia de la ley es otra, pero como las reglas solo piden un año como mínimo sin participación política en los partidos registrados, hoy son muchos los que piensan ya desde hoy abandonar sus principios ideológicos.
Iniciar una campaña anticipada con currículo político de poco puede servir en el ánimo de la ciudadanía.
Sin embargo, la respuesta de las encuestas en Nuevo León, hace pensar que la posibilidad de que un Bronco surja en cualquier lugar del norte, pues a él no le han hecho mella en su aspiración el cúmulo de cargos partidistas y puestos de elección popular que ha acumulado a lo largo de su vida.
Para el común de la gente, este esfuerzo ciudadano es un ejemplo, piensan que a el individuo lo mueve el interés de servir, pero gran decepción sentirán, si las expectativas no se cumplen o si los resultados resultan desastrosos.
De poco sirven las ganas cuando la historia se conoce, si en verdad tienen ganas de servir a la sociedad, porqué nunca fundaron una Organización no Gubernamental de apoyo, para desde sus empresas particulares ayudar a los niños con cáncer, a los adultos mayores, a las madres solteras.
Un Candidato Ciudadano no es quien reniega de su partido, sino quien desde la iniciativa privada invierte en la mejora de una sociedad con hambre.
Apostarle a las balandronadas, a los gritos inconformes a las fanfarronerías y al protagonismo de nada les va a servir, pues quedarán en evidencia por la simple revisión de su conducta anterior, de sus acciones consignadas en la prensa y sus archivos personales.
La elección en Nuevo León será el parte aguas y la oportunidad de consolidar el sistema de partidos o el nacimiento de un nuevo estilo de hacer política, aunque este espacio esté reservado para quienes huyen de su historia.
Hay quienes piensan que ya ganó, otros tenemos reservas pues las encuestas se manipulan, las redes sociales también y ya veremos si llega EL BRONCO.