6/04/2016 – El plan de Donald Trump para forzar a México a pagar su proyecto de muro fronterizo bajo la amenaza de bloquear el envío de miles de millones en remesas supone un “insulto” para los inmigrantes que envían dinero a su país y una vuelta de tuerca del discurso “racista” del aspirante republicano.
Reacciones
“Me parece un insulto. Yo gano este dinero honestamente trabajando duro aquí, y no hay razón para que no pueda enviar dinero a mi país para ayudar a mi familia”, dijo un mexicano que se identificó únicamente como Pedro mientras tramitaba una remesa desde un puesto de envíos de dinero en Long Beach (California). La también mexicana Rosa Gómez, otra clienta habitual de los servicios de envío de dinero, aseguró que “Trump no quiere a los mexicanos”. “Él es un racista que no quiere que nosotros vengamos aquí para tener una mejor vida, por eso hay que votar en contra de él”, arengó Gómez, quien obtuvo la ciudadanía al casarse con un méxico-estadounidense. Gómez recordó la importancia que tienen estas remesas, pues suponen en muchos casos el principal recurso de subsistencia de las familias de los inmigrantes. “Mando dinero cada vez que puedo, pero casi todos los meses”, indicó la mujer, que ayuda de esta forma a su madre, que vive en Culiacán.
Propuesta de ley
Las organizaciones defensoras de los inmigrantes manifestaron su rechazo al plan de Trump y señalaron que sus afirmaciones han generado una reacción en contra por parte de los votantes latinos. “Pensamos que es absurdo. Todo lo que ha dicho el candidato Donald Trump no parece estar basado en la realidad“, dijo Apolonio Morales, director de políticas del Fondo de Acción de la Coalición por los Derechos Humanos de los Inmigrantes de Los Ángeles (CHIRLA, en inglés). Según un documento de su campaña divulgado por el diario The Washington Post, la estrategia de Trump en caso de llegar a la Casa Blanca es amenazar a México con cambiar una sección de la legislación antiterrorista conocida como Ley Patriota para cortar los fondos que recibe ese país a través de las remesas de sus inmigrantes en EE.UU. Trump prometió el día que lanzó su candidatura a la presidencia completar la construcción de un muro de 1.000 millas para frenar la inmigración ilegal y cuyo coste, según el propio magnate, ascendería a unos 8.000 millones de dólares. Para el dirigente de CHIRLA, las afirmaciones de Trump no solamente lo han llevado a perder el voto de los latinos si no de muchas mujeres, “y hasta de su propio partido”. Según datos del Banco Central de México, las remesas recibidas desde el exterior sumaron en febrero pasado 2.093 millones de dólares, “el monto más alto para un segundo mes del año desde 1995”, y el 13,6% más que el mismo mes del año anterior.
Agencias