16/04/15.-“No tengo mamá ni papá, vivo con una tía que nos manda a trabajar», dijo Fito Reyes Maldonado, uno de los menores que trabajan como franeleros limpiando vidrios de autos cuando éstos hacen alto en los semáforos de la avenida Lázaro Cárdenas. «Con esto apenas ganamos para llevar un poco de pan a casa, huevo, tortilla y leche, porque además tengo una hermanita más chiquita y dos primos que vivimos en la misma casa», afirmó.
Hacen la lucha
Este medio le cuestionó entorno a que si celebraría el Día del Niño como todos, a lo que dijo que sí, que ya tenía planeado trabajar en la mañana del próximo día 30, sacar un dinerito y llevar poquita de carne para que su tía le hiciera unos tacos e invitar a su hermanita, a sus primos y amiguitos y luego ir a jugar a las canchitas de la Siete, ¿y la escuela?, se le cuestionó, “ya el año que entra me van a volver a meter a segundo año que es en donde me quedé antes de quedar huérfano”, dice. De estas hay muchas historias más, dijo otro de los franeleros que fueron entrevistados con motivo al próximo Día del Niño.
Juan Cárdenas Torres / El Bravo