Maribel Villarreal
18/07/17
Socavón por socavón
En Tamaulipas no es un tema nuevo. Los socavones y sus riesgos se agudizaron hace cosa de nueve meses justo al arranque de las nuevas administraciones municipales. Solo como antecedente.
A los gobiernos del PAN les detonó la crisis. Los organismos operadores de agua han funcionado siempre en números rojos.
En la reciente era priísta se convirtieron en entes proveedores para campañas políticas y en posiciones de premio para el pago de favores. La quiebra resultó inminente.
La alternancia destapó la cloaca.
Los obsoletos sistemas de agua y drenaje finalmente colapsaron por la falta de obras o por obras mal ejecutadas que eran una constante derivadas de oscuras negociaciones que se hicieron institucionales.
Hace unos días, en el estado de Morelos dos personas murieron tras caer su auto a un socavón. El primer responsable, el delegado de la Secretaria de Comunicaciones y Transportes en esa entidad, JOSÉ LUIS ALARCÓN también cayó…del cargo.
El presidente ENRIQUE PEÑA NIETO había inaugurado el tramo «Express» de Cuernavaca apenas en abril y previo al «accidente» se habían emitido varias alertas de riesgo que fueron ignoradas.
La historia no ha terminado. Hay una denuncia penal en proceso y una investigación de gobierno que alcanzaría a más funcionarios.
El escándalo mediático amenaza al mismísimo secretario GERARDO RUIZ ESPARZA.
El funcionario enfrenta una demanda por el presunto ejercicio ilícito de servicio público interpuesta por el diputado federal del PAN, JAVIER BOLAÑOS ante la Procuraduría General de la República.
En Reynosa ayer cayó un camión de la empresa «Concretos Tancol» en un enorme hoyo en la colonia Fuentes. No hubo lesionados.
La misma escena se ha repetido incontables ocasiones, desde hace nueve meses, en Altamira, en Tampico y en Madero, que integran la región más afectada del Estado.
Las declaraciones oficiales revelan la corrupción como origen. Obras mal hechas y obras que no se hicieron.
La Auditoría Superior del Estado tiene detenidas decenas de cuentas públicas de las COMAPAS pero el avance es muy lento con riesgo de perderse en el olvido.
La esperanza en el contexto de la alternancia política es de justicia. El reclamo social observado en las votaciones del 2016 permanece vigente.
¿Será que en Tamaulipas tendría que haber decesos para actuar en consecuencia?
Ojalá que no.