Santa Claus en octubre
18/10/2018 – Contra los Grinchs prematuros que ya andaban combatiendo a los prematuros navidosos, no solo actuaron los tempraneros “nortes” que precipitaron los termómetros, haciendo desempolvar los abrigos.
La visita del presidente electo de México a tierra tamaulipeca también fue identificada por muchos de sus testigos presenciales como una adelantada gira del viejo barbón del traje colorado que endulza la fiesta mayor decembrina.
En petit comité, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR se reunió en el Salón Independencia del Palacio de Gobierno, con diputados y senadores y con servidores públicos del Estado y la Federación, flanqueado por el Gobernador FRANCISCO GARCÍA CABEZA DE VACA, con quien antes tuvo una encerrona en su despacho.
Les recitó cifras de beneficiarios y millonarias derramas en apoyos sociales y acciones ejecutivas que aquí en Tamaulipas se aplicarán en cuanto asuma el poder federal en diciembre, dijo.
Desde su arribo, a primera hora al aeropuerto victorense, empezó a repartir definiciones.
Con el grupo de periodistas que sigue su recorrido nacional, ya no denominado “gira del agradecimiento”, dictó la primera conferencia de prensa, abundando en definiciones sobre la estrategia contra la inseguridad que animará su gobierno.
Dividir el país en 265 regiones, tratadas de manera particular, con mando único de a 300, 450 y 600 elementos de las fuerzas armadas y la Policía Federal, dependiendo de la incidencia delictiva y la convocatoria a 50 mil jóvenes para integrarse a aquellos cuerpos, así como la formación de las policías locales a acordar con los gobiernos provinciales, en el centro del anuncio.
Tras la reunión con el sector público en Palacio, otra rueda de prensa, ahora con los medios locales incorporados, destacando -Por sobre el lugar común de las ofertas reiteradas-, la garantía de que no hará acuerdos con los delincuentes, de los que aseguró no tener mensaje ni emisario hasta ahora.
Las definiciones que habrá extendido en cortito, durante su encuentro privado con el Gobernador GARCÍA CABEZA DE VACA, pueden animar cualquier cantidad de conclusiones, al tamaño de la audiencia que quiera sacarlas.
En la reunión pública se dieron trato punto menos que institucional, pero durante la conferencia de prensa en Palacio, se despidió el PEJE Presidente con j. “Para que vean”, dando un palmeado abrazo al ejecutivo tamaulipeco.
El respetable irreverente pidió algo más, pero la mirada seria del ilustre visitante aplacó las bulas.
La reivindicación de la seguridad y la paz pública, como máxima aspiración de los tamaulipecos, acompañó el paso del PEJE por la ciudad capital.
En el aeropuerto ya le esperaban algunos representantes de los colectivos de familiares de personas desaparecidas, y en la plaza de armas, por donde llegó, otros tiros, incluidos aquellos que en México capital lo vieron el lunes y les ofreció atenderlo aquí.
Lo saludaron y sobre la marcha algún documento-petición entregaron a sus colaboradores, con la oferta de darles seguimiento a aquellas madres y demás familiares que de Reynosa, San Fernando, Aldama y otros municipios se vinieron a encontrarlo, esperando la respuesta que no han hallado por cuatro y seis años, sobre el destino de sus seres queridos.