Los Hechos

José Inés Figueroa Vitela

08/04/2018

QUE NO LE DIGAN EN LA ESQUINA…

Quien quiera, entre los actores políticos de temporada, adoptar posiciones fatalistas y andar el camino de la derrota en las urnas del primero de julio, va a encontrar escusas de a montón.
Quienes no van abanderados por MORENA y sus aliados podrán decir que éstos transitan a la sombra de su candidato presidencial, quien ya lleva 18 años de ventaja en campaña.
Los que no son postulados por el PAN y sus aliados, podrán justificar adversidades en que éstos están soportados en el presupuesto, las estructuras y dominios del partido en el gobierno estatal.
Y fuera de la papeleta tricolor, quien quiera, podrá remitir sus posibles triunfos, o las derrotas propias, a “las viejas marrullerías del sistema que gobernó estas tierras por casi un siglo”.
No obstante todo eso, haciendo cuentas, encontraremos que no hay un racero y las ventajas o desventajas, las posibilidades de triunfo o derrota dibujadas en el horizonte electoral, de manera dominante, resultan unipersonales.
Las fortalezas o debilidades que se antojan en unos y otros candidatos, de cara a la competencia electoral, corresponden a lo que han hecho o dejado de hacer, cada uno de ellos, sin desconocer la incidencia del entorno, al que también cada cual ha abonado, para bien o para mal.
Prolongar, consolidar o revertir los posicionamientos en este punto de arranque, significado en el registro de los candidatos a las alcaldías, en la elección local, al que seguirán las campañas constitucionales, en las que ya se encuentran los candidatos a los cargos federales, seguirá remitido a las praxis individuales.
Botón de muestra, hasta hace medio año, nadie dudaba que el alcalde matamorense CHUCHÍN DE LA GARZA DÍAZ DEL GUANTE, se enfilaba “por la libre” a la reelección, con el refrendo de la estafeta de su partido, el PRI.
¿Es la postulación del exdirigente municipal del partido, VICTOR GARCÍA FUENTES como candidato de MORENA al mismo cargo lo que ahora tiene en duda la reelección del alcalde matamorense?
No necesariamente; en esa escena su única participación -de CHUCHÍN- fue el no haberlo conservado en el mando partidista, u ofrecido alguna opción que le mantuviera en el proyecto por él liderado, en ese apartado de la operatividad política elemental.
Pero ni la significancia de ese “golpe” mediático, ni las inercias de la figura del candidato presidencial endosables a cualquier aspirante hecho a la sombra de MORENA en las “elecciones menores”, resultan determinantes en el destino de la votación de julio.
CHUCHÍN, como producto electoral inició su desgaste cuando dejó de cumplir compromisos, cuando los mayores activos de su personalidad de hombre probo, honesto y leal se empezaron a cuestionar, cuando “los ajenos” empezaron a señalar a “los suyos” de entrarle al negocio fácil y deshonesto.
En él y en nadie más, está demostrar de manera suficiente que sigue siendo el mismo hombre que hace año y medio escogieron los matamorenses para entregarle el voto; contra ello no habrá viento ni marea que cambie su destino.
En la contraparte, si se quiere abundar en referencias, en Victoria capital, el alcalde OSCAR ALMARAZ SMER, en este punto de partida de la competencia electoral, se encuentra harto fortalecido y con amplias expectativas para crecer más en campaña.

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