LOS HECHOS

José I. Figueroa

15/08/17

Candidato único en el PRI

“Ya eran muchos… ¡y parió la abuela!”, dice la frase popular.
No solo los siete aspirantes declarados y reconocidos por el alto mando nacional para la presidencia del Comité Directivo Estatal del PRI, se negaron a declinar a favor de alguno de ellos o se retiraron de la contienda, sino que además, otros dos “espontáneos” llegaron al registro.
OSCAR LUEBBERT GUTIÉRREZ, SERGIO GUAJARDO MALDONADO, ROBERTO GONZÁLEZ BARBA, LUIS ENRIQUE ARREOLA VIDAL y JUAN ALONSO CAMARILLO, como lo habían pactado, llegaron dos horas antes de la apertura del registro, a conocido restaurante a compartir el almuerzo, en una mesa a la que por un tiempo se sumó el delegado de la Secretaría de Gobernación RABRINDANATH JUÁREZ MAYORQUÍN.
Más tarde se les sumaron ALEJANDRO GUEVARA COBOS y MIGUEL MANZUR NADER, ya solo a “echarse un café”, para salir juntos, los siete que participaron en las reuniones previas, a cumplir con el protocolo en la sede de la Comisión del Proceso Interno.
En esas estaban de su arribo, cuando marcando las 11:00 en punto se acercó, a la mesa, EMILIANO MIRELES CRUZ, carpeta en mano.
“El registro es personal”, le dijo el presidente de la Comisión, LUCINO CERVANTES DURÁN, pensando que la documentación era de otro de los aspirantes, pero éste le aclaró que él mismo era quien se estaba registrando.
MIRELES fue regidor hace tres trienios, con el aval de una agrupación de jubilados y desde entonces se ha candidateado igual para repetir como regidor, que para ser cronista del municipio, sin prosperar en esos proyectos.
En el PRI estatal es conocido, además, porque cobra como auxiliar administrativo en la Secretaría de Gestión Social y por esos corrillos va y viene cotidianamente, siempre seguido por ENRIQUE TERÁN NARVÁEZ, quien será, oficiosamente, auxiliar del auxiliar.
Por eso cuando éste último también se formó entre los aspirantes, igual se le aclaró lo del registro individual y como “su jefe”, igual contestó: no, yo también vengo a registrarme como candidato a la dirigencia estatal.
Fue el tercero en llegar a la mesa; en el ínter, se anotó el primero de los originalmente considerados, ROBERTO GONZÁLEZ BARBA.
A ellos se siguieron JUAN ALONSO, CHECO, LUIS ENRIQUE, MANZUR, LUEBBERT y GUEVARA, todos ahora sí, coincidiendo, en el reconocimiento al trabajo de la dirigencia de AÍDA ZULEMA FLORES PEÑA y a la Comisión de LUCINO, con las respectivas alusiones al alto mando nacional.
En menos de 20 minutos, ya los nueve aspirantes estaban registrados, pero la Comisión no se levantó hasta transcurridas las dos horas que la convocatoria concedió para los registros.
Para concluir el plazo, el secretario general en funciones, PEPE HERNÁNDEZ CUESTA, cantó el “10, 9, 8, 7…”, los últimos segundos para dar por concluida la jornada.
Se habrían ido antes, pero el autodenominado en el pasado “presidente del PRI alterno”, MAURICIO CERDA GALÁN, había llamado las vísperas para anunciar que acudiría a registrarse, cosa que finalmente no hizo.
Independientemente del cumplimiento de los demás requisitos marcados por la convocatoria, solo uno de los aspirantes -GUAJARDO-, acreditó el pago de las cuotas al partido, la que pasó a cubrir antes de irse al almuerzo aquel.

 

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