LOS HECHOS

José I. Figueroa

20/02/17

Estrategias

Hay quienes han cuestionado la falta de estridencias de parte de las oposiciones en el Congreso local y hasta han llegado a considerar haya divisiones en la primera minoría priísta, luego de la votación fraccionada aquella, de la elección del Auditor Superior del Estado.
En los tiempos del unipartidismo, nos acostumbramos a que las oposiciones elevaban la voz por todo, reclamaban y acusaban, a más se declaraban “víctimas” del mayoriteo, con una mano golpeaban y extendían la otra en busca de dádivas.
De cotidiano, eso llegó a considerarse ordinario.
Ahora que el PAN es Gobierno y el PRI se ha replegado a las filas opositoras, sin embargo, los escenarios han sido distintos en la correlación partidos-gobierno.
No obstante, la personalidad serena del coordinador de la bancada priísta, ALEJANDRO ETIENNE LLANO, no ha estado ayuna de señalamientos puntuales, a lo que han considerado fuera de lugar, contraria a sus percepciones, sus convicciones o eventuales intereses.
Ciertamente no han sido exabruptos, grandilocuencias o denuncias arrebatadas las que han permeado.
Lo de la votación dividida fue un tema particular, previamente dialogado, donde a las voces discordantes se concedió el derecho a votar diferente, no como un acto de indisciplina, sino como un reconocimiento a la pluralidad y madurez en las individualidades legislativas.
En general, las nuevas formas de ser oposición, desde el origen se definieron para los efectos de la bancada tricolor, como una praxis madura, reflexiva y hasta colaborativa en los temas de interés comunitario.
Pero esa estrategia, que eventualmente trasciende a la esfera del Congreso, tendrá qué ver con brindar la oportunidad a un gobierno de militancia distinta, a experimentar sus propias formas del ejercicio legislativo al alimón con el ejecutivo.
“Los priístas -se leerá después-, no fueron un obstáculo para que el PAN hecho gobierno desplegar sus planes y programas ejecutivos”.
Al menos no admitirán reclamos en ese sentido si algo no pudo concretarse, insistimos, hablando de acciones gubernamentales llanas, que de las de perfil político-electoral o electorero, más temprano que tarde el debate asaltará la escena pública.
Y del punto de referencia remitido a las estridencias en los corrillos camarales, en efecto, las oposiciones de antaño sólo tenían ese recurso para la promoción y avituallamiento; el PRI, goza de estructuras, planes y programas vigentes, por donde transita su prospectiva.
Esto y aquellos no obstó para dejar constancia de las presuntas faltas en la designación del nuevo auditor.
El dirigente estatal del Partido del Trabajo, ALEJANDRO CENICEROS, pidiendo corregir las irregularidades, advirtió, ESPINO ASCANIO es militante panista activo, participó en la entrega-recepción gubernamental, carece de la formación académica y los cinco años de experiencia en control, auditoría financiera y de responsabilidades, todos, contrarios a ley para acceder al cargo.
Por eso anunció acciones legales contra la designación de marras.
El PAN por su lado anda consolidando las estructuras propias con sus renovadas asideras.
Recién renovó las dirigencias de 21 de los 25 comités municipales a que convocó.
Al cierre del plazo para el efecto recibió la impugnación respecto a los resultados en los casos de Güémez y Padilla reclamando la anulación de las respectivas elecciones por presuntas irregularidades, mientras en Valle Hermoso e Hidalgo, canceló la elección por conflictos y por no haberse presentado candidato alguno al registro.