José I.Figueroa
4/08/16
Que el juez decida
Aunque en la primera instancia judicial electoral con los diez casos que hoy habrán de desahogarse andarán rondando la mitad de los juicios abiertos sobre la elección local del pasado cinco de junio, los principalísimos actores ya tienen hechas sus cuentas… y resultan en sumo discordantes.
La distribución en la LXIII Legislatura estatal resulta ejemplar para el caso.
Para los efectos del PRI, hablando de los escaños plurinominales pendientes de repartir, en el supuesto de la confirmación de los resultados sobre los espacios de mayoría relativa, sus números les dicen que obtendrán 6 curules de representación proporcional.
Ese arqueo concede al PAN tres o cuatro espacios por la misma vía, a complementarse por uno o dos al Movimiento Ciudadano -la variante es en los límites de la tabla que se mueven- y de a uno a los restantes Nueva Alianza, Verde Ecologista y Movimiento de Regeneración Nacional.
El PT, el PRD y el Partido Encuentro Social, por no haber alcanzado el 3 por ciento mínimo de la votación global se quedaron sin diputación plurinominal y sin prerrogativas locales a partir del próximo ejercicio.
Esas, insistimos, son las cuentas tricolores.
Los azules lo que han sacado es que a ellos les corresponden seis escaños de representación proporcional, al PRI cuatro y de una a los restantes MC, PNA, MORENA y PVEM.
El argumento discordante radica en el apartado de ley que alude a la “sobrerepresentación”.
Los del PRI aluden al límite de 8 puntos porcentuales adicionales al porcentaje total de votos: si el PAN sacó el 45 por ciento, con el 8 adicional, el 53 por ciento del total de los escaños serían 19, de tal manera que con 16 de mayoría alcanzarían tres complementarias.
En el PAN se quedan en el “caso de excepción” que establece “cuando el porcentaje de curules de mayoría supere el porcentaje límite” y en el principio de gobernabilidad que reduce a 22 el límite de curules para un partido, para darse 16 más seis.
Abreviando en la aplicación de fórmulas, acotaciones y libertades advierten:
Tan sencillo como que en la pasada elección el PRI nos superó con cerca de 200 mil votos y se quedó con seis plurinominales, dejándonos cuatro, con seis de mayoría que habíamos ganado; escenario exactamente igual al actual, pero a la inversa; nosotros les ganamos con más de 200 mil votos, tenemos 16 de mayoría y nos tocan 6 pluris.
No hacen diferencia con el escaño del distrito de Valle Hermoso, que aunque fue postulado en coalición se registró como propuesta del Partido Nueva Alianza.
Como quiera están ciertos que el IETAM concederá el escenario dibujado por los priístas y el Tribunal Local lo confirmará, pero en el Tribunal Federal -la última e inatacable instancia- han de conseguir les concedan la razón.
Finalmente, las leyes ahí están y son a los jueces a quienes corresponde interpretarlas.
De los primeros quince fallos emitidos por el Tribunal Electoral de Tamaulipas, siete fueron impugnados y llevados a la última instancia; de los diez que ahora se desahogarán habrá que ver su destino.
Son cuatro impugnaciones del PRI y sus coaligados por la elección Municipal de Nuevo Laredo, las distritales 4, 8 y 20 de Reynosa, Río Bravo y Madero, así como dos del PAN por las elecciones municipales de Abasolo y Güémez y una del PRD por la municipal de Victoria.
También desahogan los recursos de JOSÉ LUIS HINOJOSA BANDA, ARTURO LEDEZMA ARGANDOÑA y GUILLERMO ANDRADE HERNÁNDEZ; los dos primeros candidatos a regidores del PRI y el PRD en Madero y el otro del MC en Altamira; reclaman regiduría pluri que no les alcanzó en el primer reparto.