Nuestros Columnistas Locales
Locuras Cuerdas
Jorge Chávez
14/03/17
Preludio Electoral
El poder puede parecer abstracto, pero para quienes están más en sintonía con él, es decir los poderosos, sus oscilaciones se viven de manera muy concreta…con frecuencia, esto los lleva a sentirse frustrados por la distancia que existe entre el poder que los demás suponen que tienen y el que en realidad poseen. En el siglo XXI el poder es más fácil de adquirir, más difícil de utilizar y más fácil de perder. Moisés Naím. “El fin del poder”.
Un tema político muy recurrente en estos días es de las inminentes elecciones que se llevarán a cabo en tres estados de nuestra República Mexicana: Coahuila, Estado de México y Nayarit y las municipales del estado de Veracruz, así como la asignación de los titulares en las presidencias del Comité Directivo Estatal en Tamaulipas y del Comité Directivo Municipal en Matamoros del PRI.
Entrando en la numeralia es importante mencionar que de acuerdo a Luis Carlos Ugalde, ex presidente del IFE, ahora INE, nuestra democracia presupuestalmente costará este año casi 30 mil millones de pesos, seguiremos siendo una democracia bastante costosa en pesos y centavos, pero aunque parezca simplista, más caro sería no tener democracia.
El promedio del costo del voto en las cuatro entidades -Nayarit, Coahuila, Estado de México y Veracruz- es de 203 pesos.
En Coahuila el costo del voto será de 195 pesos, en Veracruz de 193 y en el Estado de México de 209 pesos, en Nayarit el costo se estima en 222 pesos.
Los partidos políticos asumen que sacando un buen resultado electoral en estas elecciones del 2017 sus posibilidades de triunfo en el 2018 crecen exponencialmente por el número de electores que en teoría estarían bajo su tutoría; pero esta argumentación no es tan absoluta como parece ya que no olvidemos que en el 2015 el PRI de Tamaulipas ganó en las elecciones intermedias los 8 de 8 y lo que parecía un buen augurio para el 2016, la historia nos demostró lo volátil que es el voto en una sociedad cada vez más politizada e informada y que, aunque muchos políticos le apuestan al olvido de sus fatalidades, pudimos ver que las redes sociales son un buen recordatorio de las decepciones de quienes ejercen el poder y que la factura electoral llega en el momento justo a través de las urnas.
El 2017 es un preliminar del 2018 y para el caso pesan mucho las entidades más pobladas. De las 32 entidades, sólo cinco tienen casi la mitad de los votantes. El Estado de México, la Ciudad de México, Veracruz, Jalisco y Puebla suman 33.2 millones de electores de los 71.7 en todo el país.
En esta vórtice electoral, Tamaulipas aporta un estimado de 2,400,000 votos aproximadamente, lo cual no representa mucho en el panorama nacional y que nos resta valor frente a un estado eminentemente centralista que nos ve lejano, distinto y distante.
En lo referente a quién se encargará de relevar a la actual presidenta del Comité Directivo Estatal del PRI, Aída Flores, esperemos que los priístas hayan aprendido su lección y sepan nominar a un político de buena nombradía y que no tenga tufo a ningún ex gobernador con cuentas pendientes, aquí o en EU y sepan deslindarse de cualquier emisario del nefasto pasado inmediato y entiendan claramente las teorías del poder de Moisés Naím en el sentido de que hoy más que nunca el poder es más fácil de adquirir, más difícil de utilizar y más fácil de perder. Los políticos con hechura a la antigua cada vez tienen más complicado su desempeño frente a una generación millennial que no cree en nadie y que todo lo investiga, todo lo cuestiona y que no perdona nada.
En el relevo inminente del Dr. Víctor García en el PRI de Matamoros se menciona mucho la figura de Roberto López Castro, se dice que es muy allegado al primer priísta del municipio y parece que le sabe al tema que eventualmente se le encomendaría, aunque hasta la fecha el mencionado líder no ha dicho esta boca es mía, se cuida de ser dueño de sus silencios y no esclavo de sus palabras.
Es importante señalar que en política, las causas y efectos no son tan exactas y claras como a veces queremos que sean, pero siempre es de suma importancia tener un referente que nos sirva para ubicarnos en el entramado político que nos ha tocado vivir.
PRI, PAN, MORENA y, en esta ocasión en menor medida, el PRD, están ya calentando motores para una contienda en el 2017 que se presume será de pronóstico reservado y el preludio histórico de la contienda del 2018.
El tiempo hablará.
