13/11/15.-Nuevas víctimas de Fuerza Tamaulipas continúan acudiendo ante las autoridades en demanda de justicia, pues en casos por separados a un hojalatero le robaron su auto descompuesto de enfrente de su casa y a una familia de la colonia Buenavista le allanaron su vivienda para robarles celulares y las carteras, para después darse a la fuga aprovechando el impenetrable manto de impunidad que los protege.
En el primero de los casos, la víctima responde al nombre de Sergio Chapa Guerrero, con domicilio en el fraccionamiento Villa Las Torres, quien relató que los agentes fueron hasta afuera de su casa para recoger un auto Chevrolet Lumina, modelo 1999, color café, argumentando que una llamada al 066 lo reportaba como abandonado.
Muestra el título
El hojalatero, les dijo que el auto era de su propiedad y les mostró el título, las llaves y se identificó con su credencial de elector en la que viene su domicilio y que corresponde a la casa en donde estaba estacionado el auto, el que con las pasadas inundaciones se le metió agua al motor y se le dañó, por lo que tenía días que no lo movía.
La corrupción
A pesar de demostrar que el auto no estaba abandonado y que era de su propiedad, uno de los agentes de Fuerza Tamaulipas le sugirió que hablara con el «mando» para que le diera oportunidad, pero el hojalatero le dijo que no traía dinero y estos se llevaron su auto con una grúa, pero al buscarlo en los corralones no lo localizó, por lo que acudió al hotel en donde se hospedan los elementos de Fuerza Tamaulipas, pero les preguntó a los agentes de guardia, pero éstos lo ignoraron y no lo pudieron comunicar con un superior para que le orientara qué hacer.
Dijo que este día iba a presentar la denuncia por la desaparición de su auto, señalando que los elementos de Fuerza Tamaulipas que fueron a su casa iban en las patrullas 756 y 743.
Robo domiciliario
En el otro caso, los agentes estatales allanaron sin orden judicial una vivienda de la colonia Buenavista en donde sometieron a una familia para después retirarse tras despojarlos de sus carteras y sus teléfonos celulares.
Fue Imelda Cosme, con domicilio en la calle 14 número 108 de la colonia Buenavista quien acudió a denunciar el robo del que fue víctima por parte de los agentes estatales de Fuerza Tamaulipas, los que se jactan de ser superiores a las demás corporaciones, lo que les permite cometer delitos con la mayor impunidad.
A pesar de las numerosas denuncias que existen en su contra, las autoridades se han negado actuar contra los intocables elementos.
Jesús Torres Salas