24/12/2018 – La falta de acuerdo entre los legisladores sobre la partida presupuestaria para la construcción del muro con México mantiene el cierre del 25% de la Administración
La Administración federal de EE UU ha dejado de prestar servicios por las discrepancias entre republicanos y demócratas sobre unos fondos de los que depende un 25% del Gobierno. El Senado no alcanzó este sábado un acuerdo y no reanudará sus funciones hasta el jueves, por lo que esa cuarta parte del Ejecutivo no volverá a operar como mínimo hasta entonces. El motivo es la partida presupuestaria destinada a la construcción del muro con México, que los demócratas rechazan.
El presidente Donald Trump intentó que los 5.700 millones de dólares (5.000 millones de euros) fueran aprobados esta semana en el Congreso. En la Cámara de Representantes —controlada por los republicanos— logró el jueves su objetivo, pero no tuvo la misma suerte en el Senado, que vivió la sesión más larga de su historia sin llegar a un acuerdo.
Este sábado, los parlamentarios republicanos mantuvieron una reunión con Trump, que envió al vicepresidente Mike Pence con una última oferta, redactada durante el encuentro. La propuesta que intentaba persuadir a los demócratas encalló en la sesión del Senado, donde los republicanos precisan al menos de ocho apoyos demócratas para sumar los 60 necesarios para su aprobación.
El 25% de la Administración federal se mantiene paralizado desde primera hora del sábado. En principio, no volverá a operar como mínimo hasta el jueves, día en que el Senado tiene previsto retomar sus funciones. No obstante, el líder de la mayoría de la Cámara Baja, Mitch McConnell, aclaró que las negociaciones continúan y que “cualquier cosa puede pasar”. El objetivo es solucionar in extremis el bloqueo de la Administración antes de que la Cámara baja pase a manos demócratas, el próximo 3 de enero.
El cese de los fondos del 25% de la Administración implica que han dejado de funcionar nueve departamentos federales, entre ellos los de Agricultura, Comercio, Seguridad Nacional, y las agencias que dependen de ellos. A su vez, cerca de 380.000 trabajadores tendrán que quedarse temporalmente en sus casas sin paga y 420.000 funcionarios “esenciales” trabajarán sin recibir su sueldo hasta que se pacte la partida presupuestaria pendiente. En términos económicos, el bloqueo le supone al Ejecutivo unas pérdidas de 1.200 millones de dólares (1.055 millones de euros) a la semana, según los cálculos de Standard & Poor’s.
El principal sindicato de funcionarios del país, AFGE, criticó el bloqueo, que consideró “penoso, inaceptable y un despilfarro de los dólares de los contribuyentes absolutamente evitable”.
Este es el tercer shutdown (cierre o bloqueo) de este año, una cifra que no se había alcanzado en las últimas cuatro décadas. A diferencia de los dos anteriores, este puede ser “muy largo”, adelantó ayer Trump, quien la semana pasada ya había manifestado su “orgulloso” ante la posibilidad de “paralizar el Gobierno en nombre de la seguridad fronteriza”.
“Construir un muro es fácil, y puede hacerse a bajo coste”, explicaba en 2015 Trump a The Washington Post, en alusión a su promesa electoral de levantar una valla en la frontera. “¿Quién pagará el muro?”, preguntaba el entonces candidato a sus seguidores republicanos: “¡México!”, respondían en masa.
Muchas cosas han ocurrido desde entonces. Trump se convirtió en presidente de la primera potencia mundial, pero todavía no ha logrado sacar adelante la propuesta. La edificación de una barrera que separe Estados Unidos de su vecino del sur tiene un coste aproximado de 25.000 millones de dólares (unos 22.000 millones de euros). El mandatario, dejando atrás sus discursos electorales, pidió al Congreso que aprobara una quinta parte del coste en los Presupuestos de 2019. Pero los demócratas no han dado su brazo a torcer.
“Trump está sumiendo al país en el caos”, dijo el líder de los demócratas en el Senado, Chuck Schumer. El presidente, a diferencia de lo que había prometido la semana pasada, culpó a la oposición del bloqueo.
Agencias.