2/12/15.- Más de diez mil personas le dieron una cálida y emotiva bienvenida a Kalimba en su debut como parte de la gira que emprende OV7 junto a Kabah.
En el marco del show número 12 que ambas agrupaciones ofrecieron en el Auditorio Nacional, el cantante de 33 años regresó con la agrupación que lo vio nacer artísticamente para interpretar algunas de las más emblemáticas canciones que los hicieron famosos hace dos décadas.
Visiblemente emocionado, en repetidas ocasiones el cantante externó su beneplácito por compartir el escenario con sus ex compañeros y con la agrupación que en su momento fue su competencia, Kabah.
«Estoy muy emocionado, en verdad, hace rato que estaba en el camerino estaba muerto de miedo, con las piernas y manos temblando, he ensayado mucho y la verdad es que la energía que se siente aquí es fenomenal, siento que he vuelto a casa», confesó Kalimba.
La energía que el también juez de «México tiene talento» desplegó en el escenario se vio reflejada cuando ambos grupos interpretaron temas como «Vuela mas alto», «Tus besos», «Mai mai» y «Un pie tras otro pie».
Los integrantes del grupo Kabah también aprovecharon para darle un caluroso recibimiento y expresaron la admiración que sienten por el, además señalaron que en unas semanas más, cuando Lidia Ávila se integre el equipo estará completo.
El intérprete de «Duele» no fue el único que regresó al escenario esta noche, Mariana Ochoa, quien recientemente fue madre, también lo hizo y aunque aseguró que aún no está totalmente recuperada, ya le urgía estar en el escenario.
«Estoy agradecida con las muestras de apoyo que he tenido de todos ustedes, aquí está mi médico, quien me autorizó que podía estar de vuelta y qué bueno porque ya necesitaba estar de nuevo bailando y cantando con ustedes», dijo Ochoa.
En el show de más de dos horas, las agrupaciones interpretaron más de 30 temas entre los que destacaron «Shabadaba», «»La vida que va», «Al pasar», «La calle de las sirenas» y «Mírame a los ojos», entre otras, para los que ocuparon más de siete cambios de vestuario.
El Universal/El Bravo