Opinión
Gaceta
Tamaulipas de guinda la semana que viene
13/10/2018 – Todo indica que el presidente electo de México, sí tendrá tiempo de venir a Tamaulipas para cumplir con su idea de agradecer que votaron por él y por la mayoría de los candidatos que su partido, Regeneración Nacional, postuló para los cargos de elección federales y municipales en la elección del pasado uno de julio.
El proyecto es que durante el miércoles 17 de octubre, vaya a Reynosa, esté en Victoria y por la tarde se encuentre con maderenses, en el municipio que gobierna desde la semana pasada Adrián Oseguera Kernion.
Desde luego que, el solo anuncio de que el presidente electo estará en la entidad, ha generado expectativas de todos tamaños, comenzando con la oportunidad que buscan muchos de hablar con él para tratar de amarrar alguna chamba sexenal, en especial aquellos que se cambiaron de los partidos en los que siempre militaron al de izquierdista de Tabasco.
Recién estaban los hacedores del lopezobradurismo en la entidad en la mesa de un restaurante de postín en el norte de la ciudad y, aunque a tono de broma alguno dijo que analizaban las posibilidades de incluir personas en las muchas vacantes que habrá en las delegaciones de las Secretarías del gobierno federal, lo más seguro es que, analizaban el proceso de comunicación que podrían tener con el presidente electo.
Esto debido a que, ya no será el mismo con el que trataron como candidato presidencial, ahora es el próximo titular del Poder Ejecutivo y eso le convierte en una persona con otro tipo de compromisos y de visiones, en la que, a lo mejor no tendrán la respuesta esperada quienes se la partieron para definir las candidaturas a los cargos que se disputaron en la elección del pasado uno de julio.
La lógica dice que los protagonistas del lopezobradurismo deben de ser los que queden en primera fila el día del agradecimiento por el respaldo que tuvo para ganar con más de 30 millones de votos la elección presidencial, pero, quién puede asegurar que así sucedan las cosas, si ahora, un candidato embestido como alcalde, puede tener mayor atención del presidente electo que, aquellos que estuvieron a la lucha política durante las campañas.
Que López Obrador venga a la entidad equivale a pensar que estarán con él, Américo Villarreal Anaya, senador de la República y su compañera de fórmula, María Guadalupe Covarrubias Cervantes, así como, los diputados federales que están en la Cámara porque fueron favorecidos por los votos que el tabasqueño izquierdista viene a agradecer a los tamaulipecos.
El punto es que, los ojos están puestos en la concreción de la fecha para la visita del presidente electo, ya que, no se ha exhibido la agenda oficial de la visita, como tampoco nadie de su equipo de colaboradores ha confirmado que suceda, excepto que el alcalde de Madero, Adrián Oseguera anunció que a las cinco de la tarde estará en su municipio, momento que aprovechará para hablar de proyectos urgentes que requiere la ciudad para evitar inundaciones por la falta de drenajes pluviales.
Respecto a la estancia en la ciudad de Reynosa, donde el presunto delegado general del Gobierno de la República en la entidad, José Ramón Gómez Leal, no pudo ganarle la reelección a la alcaldesa panista Maki Ortiz Domínguez, éste se ha conducido con muchas reservas, porque no quiere alentar esperanzas en nadie y, en caso de que la visita se concretó, será para darle un gran espaldarazo y dejar muy claro el mensaje de que, Reynosa no será para el gobierno de la República ni joya de la corona ni nada que se le parezca.
Si hablásemos de Victoria, habrá que dejar en claro que el tiempo de Eduardo Gattas Báez, quien fuera candidato a la presidencia municipal de Victoria y perdió, está atrás y que, ni aunque le muestre la foto de los pendones en los que aparecía sobrepuesto a la foto del presidente electo, le servirá para obtener una buena chamba federal, porque todo dependerá de la negociación que haga Gómez Leal a la hora del reparto de las posiciones en las delegaciones federales, que serán por allá entre febrero y marzo del 2019.
Los otros
Ya comenzó a tomar forma un movimiento de maestros tamaulipecos de todas edades, activos y jubilados, incluidos miembros de la dirigencia de la Sección 30 del SNTE, que buscarán presionar a las autoridades sindicales para que la profesora Elba Gordillo Morales, esté de nuevo en la dirigencia del sindicato, que termine su mandato como debe de ser y que convoque a elecciones de un nuevo dirigente y comité nacional.
Esto equivale a que, los maestros se organizan fuerte para derrocar del cargo al profesor Juan Díaz de la Torre, a quien consideran como un elemento que le ha fallado al magisterio y que no debe estar allí, por tanto, el creciente grupo de maestros activos y jubilados que maneja el profesor Enrique Meléndez Pérez está decidido llegar hasta las últimas consecuencias.
En cada ciudad de la entidad, hay un grupo de profesores y hasta más, que hablan con el ex dirigente de la Sección 30 y uno de los seguidores más leales a la profesora Gordillo Morales.
Todavía no se ven, porque su idea no es mediática, sino robustecer con la asistencia a reuniones, los acuerdos básicos que permitan rescatar la dirección nacional del sindicato de maestros, sabedores de que es algo urgente, porque se requiere de personas que vean por las necesidades de maestros activos y jubilados como verdaderos líderes, no como simples burócratas en una organización sindical por la que no demuestran cariño.
En otro orden de ideas, asuntos que parecían pecata minuta o que se resolverían en automático con la llegada del nuevo alcalde de Victoria, tendrán otro tipo de prioridad, es decir, se resolverán cuándo se pueda.
El odiado color verde de las patrullas de Tránsito, ese que fue satanizado por los adversarios del ex alcalde Oscar Almaraz Smer, se mantiene en los vehículos comprados en la administración pasada, porque pintarlos con los nuevos colores implica una inversión de al menos 35 mil pesos y hasta el momento no se ha definido de dónde obtendrán, por tanto, que se queden verdes, el único que circula con el nuevo color, es el de la foto que circuló en medios de comunicación la semana pasada.
Tampoco, se ven por ninguna parte las cuadrillas de bacheo que se supone andan por la ciudad, de ahí que muchas personas comenten que se extraña a los bacheadores de antes, porque eso sí resolvían las difíciles condiciones de muchas avenidas de la ciudad.
A lo mejor todo es cuestión de esperar y que, en cuanto los recursos se liberen, Victoria comience a cambiar.