La población que somos en 2018
12/06/2018 – El Día Mundial de la Población fue proclamado en 1989, cuando la Tierra superaba los cinco mil millones de personas. Ahora somos siete mil 550 millones los que habitamos la Tierra y de ellos el 65 por ciento está entre los 15 y los 64 años de edad.
Hasta los 14 años son el 26 por ciento de la población del planeta y el nueve por ciento es de 65 años y más, con la particularidad de que, casi en todos los países del mundo, las pirámides poblacionales muestran una ampliación en la parte alta de la misma, es decir, la población vive más años o envejece, ambas cosas debido a los avances de la medicina, que ampliaron la esperanza de vida a más de 75 años en este siglo, contra unos 15 años menos respecto al siglo pasado.
La idea de los científicos y médicos, era hacer que las personas vivieran más y la verdad se logró, pese a que, en caso todos los casos, los habitantes no llevan estilos de vida adecuados para evitar las enfermedades.
Pareciera que estamos educados para la enfermedad, en lugar de estarlo para la salud, que, en cualquier sentido sería mejor, más barato y con menos sufrimiento una vez que se logra alcanzar los promedios de vida. Ante ello, la población tiene un gran reto, la mejoría de sus estilos de vida para buscar la calidad de la misma, reto por lo que, también luchan todos los sistemas de salud del mundo.
Respecto a la población de México, supera a los 125 millones de personas y denota un crecimiento en el porcentaje de los mayores de 60 años, como sucede en el mundo, ya que, de 1990 para acá, aumentó de 6.4 al 11 por ciento.
En el país las mujeres son el 51.2 por ciento, mientras que los hombres el 48.8 por ciento y por edades, resulta que hasta los 15 años, la población es el 33.8 por ciento, mientras que, los jóvenes de 15 a 29 años, son casi el 32 por ciento y, aunque estos dos grupos representan el grueso de la población, con un 52.5 por ciento, también lo es que de 1990 a la fecha la población infantil se redujo del 37.9 al 27 por ciento, poco menos de 10 puntos, en tanto que, la población de jóvenes se redujo del 30 al 25.8 por ciento, es decir, más de cuatro puntos.
La pirámide poblacional de México, cada vez tiene una base más angosta, debido a la reducción constante de la fecundidad desde la década de los sesentas y el aumento de la esperanza de vida y crece más en la parte alta de la figura, porque hay más adultos.
Los adultos de 30 a 59 años crecieron últimos 28 años en un 10 por ciento, al pasar del 26 por ciento al 36.8 por ciento y los de 60 y más eran 6.4 en ese mismo período y pasaron al 10.5 por ciento, cuatro puntos más, esperándose que, para el 2015 el porcentaje de éstos últimos se duplique.
En el Día Mundial de la Población creemos que vale la pena echar un vistazo a esto de saber cuántos somos y de qué edades, porque eso de una idea de la evolución de las comunidades, sin embargo, debe ser el momento para ver otro tipo de cosas, cómo somos, cómo nos llevamos, qué hacemos para estar bien y, por la etapa política en que nos encontramos, hasta cuál es nuestro comportamiento electoral y desde luego quienes trabajamos.
De esto último, también hay datos a la mano, más que de los otros factores, por eso diremos que, el 2.4 por ciento de la población de seis a 14 años y 32.5 por ciento de los 15 a los 19 años, no asiste a la escuela.
La mayoría de los jóvenes de 25 a 29 años sabe leer y escribir, sin embargo, solo la mitad cuenta con un grado de educación media superior y superior.
La población disponible para producir bienes y servicios en el país y mayor de 15 años es de 54.6 millones de personas, casi un millón más que el año pasado y representa casi el 60 por ciento de la población en edad de trabajar, que es de 92 millones 604 mil habitantes. La población no activa desde una perspectiva económica son 38 millones de personas.
De los ocupados, 32.8 millones son hombres y 20.1 millones son mujeres, cantidad que, comparada con el año anterior en el mismo período, indica que están ocupadas un millón más de personas, es decir, la ocupación se mantiene al alza, si tomamos en cuenta que en 2014 era de 49.1 millones.
Como estamos en tiempo de elecciones nacionales y locales, podríamos decir que una parte considerable de mexicanos están ocupados en la política, porque andan en las campañas o forman parte de los equipos de trabajo de los partidos y los órganos electorales, esto quiere decir que los recursos destinados a la política y por los políticos generan derrama importante que permite tanto empleo directo como indirecto, porque la demanda de servicios y productos de la política hace que cientos de empresas produzcan durante esta etapa del proceso electoral que, como ya sabemos, concluye con las elecciones del primer domingo de julio venidero.