Gaceta

Raúl Terrazas

22/03/17

Juárez, el gran líder del liberalismo

Fue en 1865 cuando el Congreso de Colombia declaró a Benito Juárez García Benemérito de las Américas, como un reconocimiento a su constancia para defender la libertad y la independencia de México.
Además, supo dar el valor real a las luchas de los pueblos para su libertad y procuró que todos los políticos de su época basaran el futuro de las naciones en leyes sólidas que permitiesen fincar el desarrollo armónico como garantía de la paz.
Su frase “Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”, resonó en todos los países de Latinoamérica y del mundo. Formó parte de un manifiesto dado a conocer a la sociedad mexicana el 15 de julio de 1867, con motivo de su entrada triunfal a la Ciudad de México, tras la derrota y fusilamiento de Maximiliano I de Habsburgo.
El martes se conmemora el aniversario número 211 del nacimiento de quien fuera presidente de la República, cuando en 1858 fungía como titular de la Suprema Corte de Justicia de la Nación y, por ministerio de Ley debió de asumir el más alto cargo que todo mexicano puede tener, la primera Magistratura de la Nación.
Benito Juárez García, que nació en San Pablo Guelatao, Oaxaca, se fue de ahí a la ciudad de Oaxaca, para aprender a leer y escribir. Después en 1821 ingresó al Semanario de Santa Cruz y estudio Derecho en el Instituto de Ciencias y Artes.
Escaló muchos cargos políticos, fue regidor en el Ayuntamiento de Oaxaca, diputado local, diputado federal, gobernador de Oaxaca, presidente del Poder Judicial de México y Presidente de la República.
En el primer mandato como interino expidió las Leyes de Reforma, mediante las cuales declaró la independencia del Estado sobre la Iglesia y declaró la Libertad de cultos.
Después de 211 años de su nacimiento, en nuestro país hay personas que se guían por las enseñanzas y la visión del Presidente Juárez. Uno de ellos es el político tabasqueño de izquierda Andrés López Obrador, quien, aunque no lo dice, sus apariciones en público para dar a conocer mensajes, lo hace al pie de una gran foto del oaxaqueño.
Otros datos interesantes que aparecen en una infografía elaborada por Notimex, señalan que secularizó hospitales y establecimientos de beneficencia, inició el registro de nacimientos, matrimonios y defunciones por parte del Estado, decretó que los bienes de las iglesias pasaran a manos del Estado y suprimió el fuero del clero y del Ejército.
Una cosa más, resistió la ocupación francesa y tras derrotar al emperador Maximiliano, restauró la República con toda la fuerza que las leyes le daban y estableció las bases para obtener la paz que los mexicanos necesitaban para hacer que la patria resurgiera airosa de entre las luchas internas y extranjeras que había en algunas regiones del país.
Del porque muchos ven en el impulsor de las Leyes de Reforma el ideal a seguir, no requiere de una investigación profunda, basta decir que son innegables las características de líder que tuvo y su lucha se tradujo en la búsqueda de una mejor equidad del país a través de la Constitución.
Como hombre de carácter, supo poner al servicio de su país, su liderazgo basado en valores personales, entre los que destacan, la humildad como principio de su proceder, el respeto a los demás como ideal fundamental de su vida, su patriotismo que lo condujo a ser presidente de la República en cinco períodos y su carácter firme para que sus decisiones fuesen respetadas.
Don Benito Juárez García, siempre luchó por la igualdad, la libertad, la legalidad y la democracia y frente a situaciones adversas, por lo regular con inferioridad de fuerzas y aún cuando era derrotado, sabía como animar a los hombres con frases como “el pensamiento está sobre el dominio de los cañones».
El Benemérito de las Américas, se le recuerda como un hombre que supo ser un líder de valores incuestionables que buscó a toda costa que sus ideales se reflejen la vida personal, lo que nos recuerda su ideal fundamental de que, “Entre los individuos como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”.
Por la gran herencia que dejó a la nación con sus Leyes, es que, la figura de don Benito Juárez García está en los sitios donde las Leyes se aplican, como la Suprema Corte de Justicia de la Nación o los Supremos Tribunales de Justicia de las entidades del país.
El Palacio de Justicia de Tamaulipas, no es la excepción y siempre que se trata de fotos oficiales o de sesiones solemnes, Juárez está presente.
Al margen de ello, hay otra forma de ver al hombre que forjó el México real, el que hizo que sucedieran cosas al pasar de la aspiración de una nación grandiosa a una nación verdadera, es el Juárez líder del liberalismo mexicano y a partir del cual miles de hombres se congregan para trabajar en unión férrea a favor de las mejores causas del país.
Es la instauración de valores liberales, lo que hace a México diferente en la comunidad internacional, incluso, hay quienes, como Leo Zukermann, creen que muchas naciones del mundo se quedaron con la idea de tener un Juárez en sus filas para que hubiese logrado la separación del Estado y la Iglesia, porque, a estas alturas de la modernidad, las haya donde la religión determina el tipo de decisiones públicas que deben de tomarse. Es el caso del Medio Oriente.
Escribir de Benito Juárez García, es demasiado agradable, todas las cosas son en positivo, sobre todo cuando se trata de las razones de sus luchas y toma de decisiones, a favor de la patria se hicieron con humildad, en un esquema donde el servicio público se elevó, sin estar escrito, a un rango compromiso social.
Cada vez que llega el 21 de marzo para conmemorar el natalicio del Benemérito de las Américas, pero, también la entrada del equinoccio, nos damos a la tarea de recoger opiniones de personas que hay en nuestro derredor sobre el atinado papel que jugó el político oaxaqueño en la vida nacional y sólo comprobamos que la humildad, el trabajo y el estudio hace grandes a los hombres.