Raúl Terrazas
30/12/16
Retrospectiva social vs. prospectiva
Estos son los días del recuento, análisis y en muy pocos casos de conclusiones, en virtud de que, la retrospectiva no lleva a la prospectiva.
Esta última tiene que ver con replanteamientos, reencauzamiento y hasta reingeniería, aunque el cambio negativo en los escenarios nos lleva a dejar de lado la prospectiva para tratar de sobrellevar negocios, hogar y vida en la perspectiva del día día.
De cualquier manera, el común de los jefes o jefas de familia hace ver que están bien, que disfrutan al máximo los días de asueto, esos que también son para el recuento y el análisis, que por desgracia no dejan nada agradable porque la prospectiva dice que habrá muchas dificultades en el año venidero debido a los aumentos en los precios de los combustibles.
Obvio, la necesidad del Gobierno de la República de mover al alza el precio de las gasolinas y el diesel, tiene a todos los mexicanos enojados y, con mucha razón, desde el momento que la política económica que planteó el presidente Enrique Peña Nieto apuntaba a una reducción en los precios de estos productos y del gas, como consecuencia de la Reforma Energética que se impulsó en el primer tramo de la administración peñista.
Desde luego, cualquier justificación que sugieran respecto a los aumentos en los combustibles, de manera automática la comunidad la rechaza, porque todos esperaban que sucediera lo contrario.
No falta el que ya, con el uso de la prospectiva política, habla de que los aumentos a las gasolinas y el diesel serán factor para la derrota del Presidente de la República en las elecciones de su natal Estado de México y que alcanzará para una alternancia más en el Gobierno Federal.
En estos días de recuento y análisis, es determinante que en las familias se hable de las cosas buenas que les pasaron en este año que termina.
Por ejemplo, un buen período de salud, el aprovechamiento escolar adecuado de todos los que estudian, la terminación de una carrera para los que superaron su etapa universitaria, sin dejar de lado el hecho de que los negocios, cualquiera que sea su tamaño y tipo sirvieron para el sostenimiento de las familias, porque las ventas sirvieron para sacar los productos que se comercializarían.
En el sector de los servicios, el recuento no debe ser malo, porque hay consumidores para todo, desde cable, telefonía móvil o fija, internet, aquellos que se prestan para el mantenimiento vehicular o bien los que sirven para restablecer la salud de las personas, es decir, los de atención médica.
En el momento que el recuento de lo acontecido durante el 2016 se asome a lo negativo, la recomendación es sacarle la vuelta y replantear las cosas, porque llegar al final del año, tienen que considerarse como un éxito para cualquier persona, desde el momento que fue un año más de lucha y de retos que se vencieron.
Si la intención es la prospectiva económica tras el análisis que todos hacemos durante estas fechas, quizá lo mejor sea dejarlo para el cuándo tengamos que enfrentarnos a la cruda realidad que el Gobierno de la República dibuja con aumentos, en lugar de cumplir los compromisos anunciados durante la campaña realizada por Enrique Peña Nieto para ganar la titularidad del Poder Ejecutivo del país.
Son demasiados los que están en contra del aumento en los precios de los combustibles, sabedores de que ello implica que se eleven los precios de los productos y los servicios a un grado tal que pulverizarán los salarios y dejarán una estela de complicaciones en la economía, por la inflación, la alta paridad del peso frente al dólar y la posibilidad de cierre de empresas que no podrán sortear el descontrol de precios.
Los otros
Muchos viajeros de Tamaulipas, en especial de la frontera, que planearon viajar al centro del país para vacacionar, lo pensaron dos veces, ya que, el vecino estado de San Luis Potosí, es uno de los afectados por el desabasto de combustible y, por ser punto de recarga cuando se viaja rumbo a la Ciudad de México, Guadalajara o Querétaro, la realidad fue que prefirieron quedarse en sus lugares de origen para no arriesgar a sus familias.
Que conste, la escasez de gasolina en la tierra de los Jongitud y de los Nava, no se debió a los quince años de Rubí, más bien a situaciones de distribución de PEMEX, aunque en su momento las autoridades de la paraestatal negaron que hubiese desabasto.
Como de recuentos de trata, hay que decir que en el IETAM que tiene a su cargo el consejero Jesús Hernández Anguiano, fue positivo en todos los sentidos, aunque a nuestra forma de ver las cosas, la credibilidad de los ciudadanos en las elecciones organizadas por el equipo de trabajo del instituto, es uno de los mejores logros, haya ganado quien haya ganado y haya perdido quien haya perdido.
Incluso, hay quienes consideran que la chamba que le tocó al Tribunal Electoral de la entidad, fue tal ligera debido al cumplimiento del Consejo General Electoral en todos los puntos señalados en la Legislación.
Que se consumieron los tiempos para los acuerdos del IETAM y las resoluciones del Tribunal Electoral del Poder Judicial del Estado, tenía que ser así, ya que en mucho se dependió siempre de la aportación de pruebas y documentos de quienes se inconformaron con las elecciones y sus procedimientos.
Al final de cuentas, el cambio en el resultado de las votaciones estuvo a salvo de cualquier intento de modificación debido a presuntos actos ilegales realizados por actores de diferentes partidos políticos.
Una cosa más, es inexacto que el ex diputado independiente, doctor Alfonso de León Perales reclamará la dirigencia del Partido Movimiento Ciudadano de Tamaulipas y lo más probable es que, de continuar en la política, lo haya en el partido del otro movimiento, el de Regeneración Nacional, influenciado por el ex candidato a la gubernatura, del PMRN, Héctor Garza González, quien fue diputado por el PRI hace algunos ayeres, pero ahora, está entregado en alma e ideología a la causa del político tabasqueño, Andrés López Obrador.
En las redes sociales anda una foto de calzones verdes, para el buen deseo de que en el 2017 a todos nos alcance la gasolina tras el aumento ya anunciado por la Secretaría de Hacienda y Crédito Público. Verdes en lugar de rojos, porque los de este último color son los originales para buenos deseos en el año siguiente.