Raúl Terrazas
18/08/16
Elección tamaulipeca limpia
Tamaulipas no es de las entidades con líos graves de impugnaciones respecto a la elección del primer domingo de junio pasado.
Incluso, los resultados del proceso para gobernador de la entidad, no requirieron del uso de la Ley de Medios de Impugnación que se estrenó en este año.
Si hay revisiones en los Tribunales Electorales tanto estatales como en las Salas Regionales del Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación, de la elección de gobernador en Chihuahua, Puebla, Oaxaca, Hidalgo, Aguascalientes y al parecer hasta Veracruz.
Es decir, la mitad de los que tuvieron votaciones para la renovación del Poder Ejecutivo y cuyos documentos están en poder de magistrados atentos a las fechas establecidas por las leyes locales para resolver las demandas planteadas por partidos y ciudadanos.
El hecho de que en Tamaulipas, las impugnaciones se refieren a Ayuntamientos y Diputaciones locales, facilita más las cosas y nos lleva a pensar que para este sábado 20 de agosto, fecha en que vence el plazo para la resolución de los casos aceptados en las instancias judiciales.
Cuando se trata de impugnaciones a la elección de gobernador, en virtud de que los casos pasan a la autoridad federal, las Salas Regionales del TRIFE, como responsables del análisis de las querellas, tienen como plazo resolver antes de que se llegue la fecha de la toma de posesión del cargo de gobernador.
Ya dijimos que en esta entidad el gobernador electo, Francisco García está exento de líos jurídico-electorales, por tanto, dedica su tiempo al cien en asuntos que tienen que ver con relaciones de interés capaces de generar inversiones o apuntalar recursos de agencias norteamericanas para el desarrollo de proyectos fronterizos.
Además, el equipo jurídico que trabaja con él está dedicado a asuntos relativos a la transmisión del poder y la alternancia, por tanto, el tema electoral se da por superado.
Hay ocupaciones postelectorales relacionadas con la entrega de las comprobaciones sobre los recursos que a manera de prerrogativas fueron entregadas al Partido Acción Nacional y a sus candidatos para la realización de sus campañas, como se hizo a todos los partidos que intervinieron en las elecciones.
Lo básico es que, con el triunfo en la bolsa desde la noche del cinco de junio pasado, el gobernador electo, debió de cuidar a extremo que su equipo de jurídico y contable de la campaña, así como, del comité estatal del PAN, hayan pusieran a disposición del IETAM los informes requeridos por la Comisión de Fiscalización.
Si no hay impugnación de la elección de gobernador, puede afirmarse que se trató de una elección limpia, en la cual, los recursos que pone a disposición de partidos, candidatos y ciudadanos la Ley de Medios de Impugnación Electoral de Tamaulipas, no fueron usados.
Hay versiones en el sentido de que las impugnaciones de los priístas que perdieron la elección si existen, pero, corresponden a otro escenario.
Y es que, a toro pasado, se comenta que el no triunfo del diputado federal Baltazar Hinojosa Ochoa, tuvo que ver con inacciones de gente del tricolor, por tanto, hay quejas públicas, solo que, nada tienen que ver ni con la Ley de Medios de Impugnación ni con los Tribunales Electorales.
En el escenario nacional, el triunfo del ex senador Francisco García, es considerado contundente y de gran participación al alcanzar más de 700 mil votos para su causa.
No lo ha dicho la autoridad electoral, pero, el esquema bajo el que se manejan ahora los procesos electorales está enfocado a dar vigencia a elecciones libres, auténticas y periódicas, elementos que las convierten en legítimas o dicho de otra manera, que cumplen con los principios rectores de certeza, imparcialidad, independencia, legalidad, máxima publicidad y objetividad.