Gaceta

Raúl Terrazas

16/02/16

Mujeres, mito electoral vs. realidad

Si la dirigente estatal de la Organización de Mujeres del PRI, Susana Hernández Flores dimensionó ya el tamaño de la responsabilidad que tiene para llevar al triunfo a las 22 candidatos a alcaldesas, es probable que ni duerma bien y si lo hace es que ha visto muy a la ligera eso de la equidad de género prevista en la Legislación Electoral.
Obvio, si duerme bien es que ya tiene una delegada de la organización que estará día y noche en la talacha de precampañas y campañas para que las mujeres que sean candidatas, respondan con creces a la confianza que los dirigentes del PRI depositan en ellas.
Las cosas no son en automático, es decir, el hecho de que las mujeres sean candidatas no quiere decir que ya tienen el triunfo en las manos, porque hay casos como el San Carlos que demandará trabajo al triple, ya que Norma Esther de la Fuente Aguirre, batallará para hacer que la gente del municipio la considere como la opción requerida en este momento para el tricolor.
La ventaja que hay es que sus adversarias y adversarios que postulen otros partidos políticos podrían no representar un riesgo para la derrota, sin embargo, el tamaño del trabajo proselitista demanda atención especial.
El extremo al o de San Carlos podrían representarlo Altamira y San Fernando, por citar dos municipios ya que, tanto Griselda Carrillo Reyes, como su tocaya Griselda Dávila Beaz, que son postuladas por esos municipios tienen una mejor percepción de los ciudadanos para los cargos que buscan.
El asunto es que, el Organismo de Mujeres Priístas de Tamaulipas, tiene que hacer una evaluación puntual de la situación de cada candidata tanto para la alcaldía como para las Diputaciones Locales y de inmediato formar equipos de trabajo que vayan a colaborar con ellas para que las actividades partidistas y políticas dejen resultados sólidos.
Cuando Hernández Flores discurseó en la reunión de Delegados que se llevó a cabo el pasado fin de semana en esta capital para establecer el compromiso de sectores y organizaciones priístas con el precandidato Baltazar Hinojosa Ochoa, hizo ver que traen sed de triunfo y que están listas para trabajar por el triunfo, de ellas como de ellos en las elecciones del primer domingo de junio venidero.
Este lunes en atención a la convocatoria emitida por el comité estatal del PRI, se registrarían las precandidaturas de ocho mujeres, para haya hasta el momento 14 precandidatas, de tal manera que, esta misma semana se determine quienes serán las ocho restantes para llevar a 22 y cumplir con lo previsto en la Ley de que la mitad sean mujeres y la mitad varones.
Este lunes se registraron además de la que va por San Carlos, Esther de la Fuente Aguirre, y que de entrada dejó mucho que desear desde una perspectiva política, se registraron Mónica Saldívar Quintana por Jiménez, Sandra Verónica Benavides Castellanos por San Nicolás, Margarita Perales Salazar por Díaz Ordaz, Olga Lidia Landa Zamora por Guerrero, Yesica Selvera Garza por Abasolo, Genoveva Córdova Castro por Palmillas y Julia Grimaldo Mata por Padilla.
Creemos que cuando menos en la mitad de Tamaulipas, Susana Hernández Flores y su equipo de trabajo deberán estar en forma permanente, porque malo será el asunto si las precandidaturas y las candidaturas de mujeres se conviertan en un riesgo para el PRI.
Faltaban por resolverse 13 municipios, Méndez, Burgos, Cruillas, del Valle de San Fernando, en los cuales hay advertencias muy claras sobre la importancia de que el PRI seleccione bien a los candidatos, ya que las personas de la tierra del siempre bien recordado líder agrario don Ernesto Rodríguez, están deseosos de que haya candidatos que responsan a los intereses y a las expectativas de los grupos sociales y políticos.
Al menos eso fue lo que dijo el Alfonso Moya Rodríguez, uno de los que está listo para el llamado del tricolor y lo que nos hace pensar que nos será fémina la que postule el tricolor.
Otros municipios por los que podría haber candidatas son Soto la Marina, Bustamante, Miquihuana, Antiguo Morelos, Nuevo Morelos, Gómez Farías, Burgos y Llera.
Quedarían para los varones además de Méndez, Mier, Ocampo, Villa de Casas y Cruillas, aunque las negociaciones estaban en todo lo alto en el comité estatal del PRI, dado que, las prospectas y los prospectos deberían de reunir cierto perfil que les convierta en personas que generen votos, porque solo así la carga proselitista será pareja o lo que es lo mismo, no esperar que el precandidato a la sucesión gubernamental, Baltazar Hinojosa Ochoa, les resuelva la vida a las que van por la alcaldías.
En Güémez, donde no hubo precandidata, por aquello de ser un municipio de los chicos, repite como propuesta del PRI el ex alcalde Arturo López Carbajal, quien mostró a propios y extraños que ahora sí trae el respaldo de los Comisariados Ejidales y de varias organizaciones del lugar. Resulta obvio decir que desde hace varios trienio le traía ganas de nuevo a la alcaldía, tantas como alguna vez las trajo su vecino de Abasolo, Juvenal Ramírez Lucio, a quien no se le ha hecho llegar por tercera ocasión al deseado e ilusionado puesto.

Los otros
El doctor Roberto Hernández Báez, de la Familia Báez Rodríguez de esta región, pero oriundo de Tampico, porque su padre al casarse se llevó para allá a la maestra María del Refugio Báez Rodríguez, hermana de Jaime y Juan Báez, es desde este lunes el Delegado Regional del Instituto Mexicano del Seguro Social.
Sustituye al licenciado José Assad Montelongo, quien desde hace varios meses estaba en la cuerda floja de la institución.
El nuevo Delegado viene de San Luis Potosí donde Trabajaba como Delegado de la PROFEPA, aunque el sexenio anterior estuvo en esta capital como titular de la COEPRIS en la Secretaría de Salud. Desde luego su designación no fue este lunes, sino hace poco más de dos semanas, una vez que el Consejo Nacional del IMSS sesionó y aprobó su nombramiento, cuya propuesta venía de un área diferente a la Dirección General del Instituto, según esto desde donde se maneja la política interior del país.
En San Luis Potosí, tuvo compañero Delegado Federal a otro tamaulipeco, César García Coronado, quien trabajó también en el sexenio anterior en la administración estatal.