Entregan cuerpos de muertos en volcadura

15/01/2016 – Fueron entregados a sus familiares para que les dieran cristiana sepultura los cuerpos de las tres personas que fallecieron al volcarse una camioneta Ford Explorer, color negro, sobre la carretera a Reynosa a la altura de lo que fueran las instalaciones de la antigua Aduana.
En el lugar quedó sin vida la señora Oralia Alejandro González, de 60 años de edad y domicilio en la colonia Reforma y fue su esposo el que acudió a solicitar los restos mortales de su mujer, trascendiendo que ella trabajaba en una maquiladora, dejando pendiente su jubilación, la que estaba programada para los próximos días, pero la muerte le tenía preparado otro destino.
En el accidente murió su hermano, el carpintero y ebanista Valentín Alejandro González, de 49 años de edad y domicilio en la calle Acción Obrera de la colonia Reforma, quien era el que conducía la camioneta y al perder el control del volante se salió del camino dando volteretas, saliendo los cuerpos de la unidad motriz.

El consentido
En la fatal volcadura perdió la vida el joven Felipe Alejandro Padilla, de 22 años de edad, quien murió cuando era trasladado al Hospital General, trascendiendo que éste era el más pequeño de sus hermanos y el consentido de sus padres.
La madre de Felipe Alejandro, la señora Martha Padilla Martínez, de 48 años de edad, fue la única sobreviviente del mortal percance y aunque inicialmente ingresó al Hospital General, fue trasladada al hospital del Instituto Mexicano del Seguro Social de donde es derechohabiente.

El celular
Aunque no está confirmado, pues la única sobreviviente no está en condiciones de rendir su declaración, pero se especuló que Valentín Alejandro González perdió el control de la camioneta al distraerse para contestar el teléfono celular, cuando circulaba por la carretera a Reynosa con destino a Matamoros.
Del accidente tomó conocimiento personal de la Unidad Investigadora Número Uno, hasta donde acudieron los familiares de los ahora occisos para solicitar la entrega de los cuerpos para rendirles póstumo homenaje.

Jesús Torres