11/12/2018 – WASHINGTON.— Una juez de Estados Unidos condenó a 14 años y seis meses de cárcel a Víctor Manuel Félix Félix, considerado operador financiero del Cártel de Sinaloa hasta su detención en marzo de 2011 y consuegro de Joaquín El Chapo Guzmán. No obstante, Marilyn Huff, la encargada de dictar sentencia desde una corte federal en San Diego, California, decidió que la condena empezaría a contar desde su arresto, por lo que Félix Félix sólo deberá cumplir siete años de cárcel en EU.
Sin embargo, y si puede demostrar buena conducta, será liberado en cuatro años, ya que la ley estadounidense reduce en 15% las sentencias por buena conducta. El Señor se había declarado culpable de dos de los 10 delitos de los que se le acusaban: lavado de dinero y narcotráfico. Enfrentaba penas que iban desde los 10 años de cárcel hasta cadena perpetua.
La defensa, liderada por Guadalupe Valencia, pedía 12 años de cárcel, mientras el gobierno estaba pidiendo al menos 15. Finalmente, la juez Huff decidió que por su edad (61 años) y las condiciones en las que ha estado recluido tanto en México como en Estados Unidos la pena adecuada son 14 años y medio que, con los cálculos reales y siempre con buena conducta, le liberarán de una prisión federal de la Unión Americana en 2022.
Tras ello será deportado a México, donde aún tiene cargos pendientes. Extraditado en diciembre de 2017 a Estados Unidos, estaba acusado de 10 delitos cometidos entre 2010 y 2011, que además de varios cargos de narcotráfico incluían pertenencia a banda criminal continuada. Su caso, tal como resaltó en más de una ocasión su abogado, no estaba relacionado con El Chapo de ninguna manera.
Si bien al llegar a territorio estadounidense dijo ser inocente, el pasado mes de septiembre decidió cambiar su declaración y así evitar ir a juicio. La aceptación de los cargos no implicó ningún tipo de cooperación con el gobierno de Estados Unidos en ningún caso. “Cien por cien no”, dijo el abogado Valencia, el preguntarle si una condena que pudiera parecer tan favorable a Félix Félix se debía a que había cooperado con la fiscalía.
“No se le ha pedido y nunca lo haría”, sentenció el letrado, experto en casos parecidos. El Señor estuvo en la sala cuando fue sentenciado, y en su última declaración antes de escuchar la sentencia explicó cuán difícil ha sido el camino para él y su familia desde la detención, especialmente por el aislamiento vivido, ya que sus familiares no tienen permiso para visitarlo, explicó Valencia a este diario.
El Señor fue detenido en México en marzo de 2011, tras organizar dos envíos de cocaína desde Ecuador hasta México para un agente encubierto de la agencia antidrogas de EU, la DEA.
El agente encubierto se había ganado la confianza de la organización liderada por Félix Félix, al aceptar transportar dinero en efectivo de EU y Canadá hasta México.
Agencias