21/04/2016 – A pesare que cada vez más personas se preocupan por la salud de sus mascotas, en la actualidad la situación de algunas veterinarias de la localidad es un poco complicada ya que han dejado de recibir clientela que anteriormente venía del Valle de Texas, esto debido a la inseguridad.
Conrado Manzano, médico veterinario en esta plaza, comentó que desde hace algunos años ha observado que las personas se han preocupado más por sus animales de compañía y los llevan a los servicios profesionales.
“Desgraciadamente aquí en la frontera estamos viviendo la crisis de la situación de la violencia y muchos de los clientes que venían del Valle de Texas no están cruzando y nos ha afectado”, aseguró el médico veterinario.
Menos clientes
Recalcó que este decremento de clientela del lado americano ha sido hasta en un 40 por ciento en los últimos meses, lo que sin duda ha afectado a muchos negocios del ramo que tenían su padrón de clientes de ese sector.
Sin embargo esta situación se ha compensado un poco gracias a que ya existe más preocupación de la gente en Matamoros por sus mascotas, ya que se han preocupado en que sean vacunados, hacerles cortes de pelo y que los dejen limpios de pulgas y garrapatas.
Consideró que hay algunas temporadas en el año que es mayor la afluencia de gente en las veterinarias, sobre todo en la época de calor, que es cuando más personas quieren mantener libres de garrapatas y pulgas a sus perros.
Cuidado de animales
Señaló que es importante que la gente se acerque con sus mascotas a los especialistas para que antes de que se presente la situación más intensa de calor se les dé el medicamento adecuado para que no tengan ese tipo de problemas.
Por su parte, el coordinador de salud animal de la Jurisdicción Sanitaria, Francisco Javier Cadena, mencionó que es importante que la gente se preocupe por sus mascotas ya que un buen número de personas las traen sueltas y hacen travesuras a los vecinos.
Pero reiteró que efectivamente las personas se preocupan cada vez más por mantener al día las vacunas de sus mascotas y acuden, ya sea a un negocio particular o al Centro Antirrábico a aplicarles las dosis que requieren.
Juan Carlos Jiménez