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Discriminan y excluyen en las empresas a las personas invidentes


1/08/2016 – A pesar de que en la ciudad de Matamoros las asociaciones civiles hacen mayores esfuerzos apoyar y promover ayuda para
las personas que no pueden ver, esto no sucede con la mayoría de población, porque los invidentes enfrentan a diario la falta de sensibilidad social, falta de oportunidades de trabajo en empresas, y afrontan la discriminación en todos los ámbitos y en todas sus formas, dio a conocer Noé Rolando Sánchez Mendoza.

El director de la Escuela para Débiles Visuales -asociación civil local que tienen como finalidad primordial la enseñanza del Sistema Braille, y brindar orientación para los invidentes de sectores y regiones de escasos recursos y grupos vulnerables-, dijo que es fundamental un mayor compromiso y reflexión por parte de la población para asistir y ayudar a desarrollarse más las personas invidentes.
Dijo que en esta escuela asisten personas invidentes a quienes se les enseña a leer y escribir mediante este sistema táctil, se les enseña a caminar y se les instruye a andar de manera segura sin golpearse, con lo que cual se pretende que las personas débiles visuales tengan mayores oportunidades de desarrollo y para que puedan muchas actividades como una persona que sí puede ver.

Piden a familias  buscar ayuda

“Una de las dificultades que se enfrentan muchas personas invidentes y niños que tienen ceguera es la sobreprotección de sus familias, que en su busca de darles la mayor protección, esta resulta ser contraproducente en la vida del menor o del adulto”, dijo el titular de esta escuela especializada.
Destacó que, “un problema muy recurrente que se presenta en la ciudad es que los padres que tienen hijos invidentes los sobreprotegen y no acuden o buscan ayuda para que puedan aprender muchas cosas que les será fundamentales para su óptimo desarrollo, porque lejos de hacerle un bien les hacen un mal”.

Sánchez Mendoza, comentó que, las personas débiles visuales tienen un potencial grande como toda persona y pueden adquirir capacidades muy importantes, pero que requieren de la educación, enseñanza y capacitación necesaria para desarrollarlas y exponerlas de la mejor manera.
El director de esta escuela que se ubica en la colonia Arboledas -entre las calles Encino con Aguacate número 193-, lamentó que en Matamoros no hay cultura para ayudar a que las personas invidentes tengan una mejor calidad de vida, y que por el contrario, mucha gente les perjudica y hasta agrede con una actitud poco sensible, porque se observa -dijo- que personas no les dan prioridad a los invidentes ni les brinda ayuda en la calle, en los comercios, espacios públicos, entre otros lugares.

Abelardo López Guajardo

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