Rafael Loret de Mola
28/08/15
*Los Caciques Moreira
*De “MUERTOS VIVIENTES”
*Una Tarde en Linares
No hay mal mayor en México que los caciques, latifundistas obcecados –la mayor parte miembros de la corrupta clase política-, que usan su poder contra los demás, abusan de sus peones, labran fortunas amorales, se protegen bajo los pantalones de los “capos” y negocian abiertamente con sus cómplices dentro de la estructura oficial. Por esta razón, en las treinta y un entidades del país, en todas ellas, el clamor se extiende y exige cuentas que nunca son satisfactorias a los mandatarios sinvergüenzas y a sus corifeos, los tunde-teclas mercenarios.
Hace una semana, el nepotista gobernador de Coahuila, rubencito moreira, quien heredó el cargo de su hermano Humberto con el visto bueno de la madre de ambos quien demandó al primero actuar por los designios de la “sangre” –la de ellos quienes se creen superiores por tal formación-, y limpiar de obstáculos el camino para que el segundo mantuviera el poder familiar prorrogando su cacicazgo político y ante el asombro del país entero. Pocas veces se había atestiguado bajeza tan grande contra una noble población… por desgracia demasiado tolerante.
Este columnista, no pocas veces, ha manifestado su enorme cariño por la tierra coahuilense; y además, porque así lo siento, declaré alguna vez que me hubiera gustado nacer en ella por la afinidad con tantos personajes surgidos de las entrañas del desierto y formados en la compleja cultura del trabajo y la dedicación, tantas veces a contracorriente. Por desgracia existe un “pero”: la displicencia mostrada ante la formación descarada del cacicazgo y la continuidad del priísmo ladrón en el poder. ¿Exagero? Ningún otro mandatario, de una larga lista de rapaces, había quebrado a su entidad como lo hizo humberto para acariciar con ello, desviando recursos hacia la campaña pueril de peña nieto en curso hacia Los Pinos, la posibilidad de escalar posiciones hacia la cúpula presidencial. Se quedó en veremos porque saltaron las cuentas mal habidas y la burda lacayunería de los congresistas estatales que se dieron por bien servidos sin siquiera ser llamadas a avalar los empréstitos desproporcionados.
El menor de los moreira dejó el cargo, para engañar a la militancia de su partido, para erigirse en presidente nacional del PRI el 4 de marzo de 2011, con una parafernalia olvidada y con el acarreo descarado como método de glorificación terrenal. Cual si se tratase de un iluminado. Pero el valor le duró quince minutos; el día de su asunción como dirigente Saltillo fue quebrada a golpes de tiroteos callejeros y con incendios en la Sierra de Arteaga –una de las más bellas del país-, devastando 40 mil hectáreas, a manera de advertencia del espurio calderón, entonces en su último año de su deplorable gestión, alentado por el miserable catalán Antonio Solá Recquer, quien situado en Torreón se armó lo suficiente para dar con los hilos más delgados que sostenían a la marioneta peñista. Qué bueno que lo hizo; pero que amorales sus métodos bajo el poder de la Presidencia.
Y así humberto –a quien consideramos el político del año 2010 por su espectacular escalada para luego ser derribado con cuanto había escondido-, fue bombardeado con un hecho que no pudo subsanar: la “cola” de treinta y tres mil millones de pesos muchos de los cuales sirvieron para engrosar las disponibilidades proselitistas de peña sin ser motivos de auditoría alguna por parte del inescrupuloso Instituto Nacional Electoral. Pura desfachatez.
Esto es: por su futuro el menor de los hijos de doña Evangelina Valdés –quien los maneja como si todavía fueran niños mientras los colaboradores de ambos pasan pena ajena-, dejó a su entidad en condiciones deplorables, asfixiada, sin perspectivas de futuro. ¡Y todavía habría de llegar rubencito para iniciar una guerra fraterna con su antecesor, su propio hermanito, con el saldo del asesinato del hijo del primero, José Eduardo Moreira Rodríguez! Un clan de rateros y asesinos de la peor calaña.
Pese a ello se mantienen. Contra humberto, quien tantas esperanzas despertó por su fogosidad contra la derecha hasta caer por sus graves fallas descubiertas por calderón y cobradas sin el menor rubor, existe igualmente una acusación por “lavado de dinero” en una corte “del estado de Texas que lo involucró en operaciones de lavado de dinero a través de un prestanombres llamado Rolando González Treviño, quien aceptó declararse culpable e implicó al ex-gobernador”. La cifra inmoral que se maneja es de dos millones de dólares depositados en diversas cuentas. El menor está con la soga al cuello.
Estos son los “animalistas” que, primero, inauguran un Museo Taurino en Saltillo, el mejor del país, para honrar a la figura del saltillense Fermín Espinoza “Armillita chico”, y ahora prohíben las corridas de toros –en una entidad en donde casi sólo se come carne de bovino-, por pleitos de comadres entre ellos y el empresario Armando Guadiana Tijerina, dueño de minas de fluorita y carbón ambicionadas por el clan caciquil, quien además anunció su propósito de lanzarse como candidato independiente al gobierno estatal, declaración con focos rojos para los planes sucesorios de la señora Evangelina. ¡Dios nos salve!
Sucede que quedan, en lisa, todavía dos hermanitos de los moreira: Carlos y Alvarito, el primero dirigente magisterial y el segundo funcionario municipal en Saltillo, deseosos de continuar la misma senda porque Coahuila, creen, es de ellos como en el siglo pasado Chihuahua fue de Luis Terrazas, el mayor latifundista de la historia y quien incluso llegó a enfrentarse al general Porfirio Díaz Mori cuya figura enciende a quienes pretenden perpetuarse en el poder sin límites.
¡Pobre Coahuila, tan cerca de los Estados Unidos y bajo las vísceras de los moreira! Sólo falta que, en alguno de sus ranchos y en secreto, como ya ocurrió con fox y compañía en San Cristóbal, inviten al rejoneador Pablo Hermoso de Mendoza a lidiar reses… ya sin “Cagancho”, el equino inmortal recientemente fallecido a los treinta y dos años de edad –equivalentes a 128 años en un ser humano-.
¿Por qué nadie investiga cuáles fueron las inversiones de BANREGIO y su procedencia? Porque hay señalamientos directos acerca de que los moreira adquirieron el banco y colocaron a sus prestanombres, como en el caso de Rolando González Treviño –detenido en los Estados Unidos-, como nuevos y únicos miembros del consejo de administración. Esta es la dura realidad que implica las descaradas y ruinosas operaciones financieras cuyos efectos paralizantes hoy sufren los coahuilenses. Insisto, no entiendo la razón por la cual mis amigos de Coahuila, de Saltillo y Torreón sobre todo, además de Monclova y Piedras Negras, soportan el yugo y parecen conformarse con el estado de cosas.
¡Jamás debieron elegir a rubencito, el mayor, aunque lleven al PRI en sus entrañas! Dicen algunos militantes de este partido que fueron engañados pero lo dudo. Sucede que nunca ven a los ojos a quienes carecen de autoridad moral y no sostienen la mirada, como rubencito, porque sencillamente temen ser descubiertos por sus interlocutores. Por algo, el gran regio, Manolo Martínez, decía:
–Debemos ver siempre a los ojos de los toros porque son como los de los seres humanos: en ellos se reflejan cuáles intenciones llevan por dentro y así puede saberse cómo lidiarlos.