Rafael Loret de Mola
28/05/15
*Enigmas Inoportunos
*Los Muertos Gritan
*Amigo Sudamericano
– – – – – – – – – – – – – – – – –
A diez días de la celebración de los comicios federales intermedios, con la inclusión de proceso estatales para renovar las gubernaturas en nueve entidades y algunos más, como en el Distrito Federal, ayuntamientos y jefes delegacionales así como legisladores estatales, la desconfianza cunde y son más quienes, en vez de pensarse por quién botar optar por el debate de si deben o no acudir a las urnas para anulas sus votos o abstenerse de participar en el proceso quedándose en casa a observar un inefable partido de fútbol –de esos que la FIFA, una de las grandes mafias universales, programa con hondos intereses-, o seleccionar entre la enorme oferta de películas de todos los tiempos. Habrá quienes elijan “El Candidato” o la histórica “El Ciudadano Kane”, de Orson Welles, para reírse de sí mismos.
El escándalo protagonizado por el racista y prepotente Lorenzo Córdova Vianello exhibió, con crudeza, la tremenda separación de clases entre un conglomerado plural pero que no acepta la igualdad respecto a quienes considera inferiores por su manera de hablar o sus costumbres; también por un acentuado concepto de la moral que exhibe las trivialidades de nuestro entorno y convoca a una mayor espiritualidad que resulta jocosa entre los imbéciles… como Córdova Vianello a quien se le apreció “Toro Sentado” en la voz de los chichimecas quienes, por supuesto, repelen votar tras siglos de engaños, parodias y miserable paternalismo. ¡Me encantaría tenerlo tan claro como ellos!
La permanencia de Córdova es una bofetada contra las elecciones. Ya se había determinado, por un estudio del IMCO –Instituto Mexicano para la Competitividad A.C.- y del CIDE –Centro de Investigación y Docencia Económicas A.C.-, que el noventa y un cierto de los mexicanos, empadronados o no, no confían en NINGÚN partido político en cuanto a su corrupción interna y a la pobre representatividad del colectivo. Ello significa que sólo votan, entre ellos, quienes se creen responsables en extremo y consideran que la única manera de construir la democracia es acercándose a las urnas de modo recurrente, insistente, temiendo además algún castigo como represalia gubernamental a pesar de que, a través de todas las elecciones no hay un solo caso de un ciudadano sancionado por anular su voto o abstenerse. La ley puede llamar a Misa pero no por ello asegura la asistencia de los feligreses cuando el cura tiene fama de pederasta… como tantos.
A veces resulta que la desconfianza extrema en el proceso electoral, como ahora, nos invita a reflexionar sobre el católico que, puntualmente, acude a las celebraciones dominicales hasta que un día se encuentra con la imagen de Luzbel en el sitio correspondiente al altar de Dios. Es obvio que saldría rápidamente del templo sin implicar con ello una ruptura con sus creencias más hondas; al contrario, quedarse en la contemplación del “Maligno” sí sería, sin duda alguna, un grave ultraje a lo sagrado en contra de cualquier principio doctrinal. Los sitios no necesariamente implican la permanencia de nuestras devociones y convicciones cívicas.
En un país tan sensible, como el nuestro, en materia de indigenismo y en donde, por desgracia, las afrentas contra los indígenas son frecuentes y abyectas, no es posible tolerar ni el más pequeño rasgo de racismo en la clase gobernante, mucho menos cuando se trata del presidente consejero del Instituto Nacional Electoral tras una convocatoria precisamente contra la “discriminación” en materia comicial de infinidad de pueblos tribales a quienes se ha optado, tantas veces, por dejar en la marginación muchas veces por comodidad o negligencia de la clase gobernante.
Pero lo que molesta también es la exposición de una cinta grabada el 28 de abril y hecha pública el 20 de mayo, en el lapso final de la contienda comicial. Lo observé desde la semana anterior cuando surgió, con justicia, la petición general para un linchamiento profesional del señor Córdova, una petición justa y razonable después de escuchar sus insolentes palabras sobre los Chichimecas y su guía, convocados por el instituto dirigido por él, precisamente con la vana pretensión de integrarlos a los procesos comiciales cuando únicamente se trataba de propaganda vacía y mentirosa en pro del consejero presidente. Una bazofia.
Más nos preocupamos cuando, por los tiempos, el hecho pudo inscribirse como parte de las presiones recibidas por la oficialidad estratégica –digamos Aurelio Nuño Mayer y Alejandra Lagunes Soto Ruiz, ahora bastante desmejorada como enrique peña-, para frenar la posible cancelación del registro del Partido Verde por sus innumerables muestras de intolerancia hacia en INE y su ausencia de equidad, sobre todo, además de sus negativas constantes a cumplir con las leyes respectivas, excederse en sus gastos –debiera investigarse a las fuentes del dinero “extra”-, y aliarse con el PRI para cobijarse al tiempo de extender sus convocatorias a favor del peñismo. Una manera, impertinente por donde se vea, de construir la candidatura presidencial de su nuevo “niño verde”, el gobernador de Chiapas, Manuel Velasco Coello, el novio más pastoso de cuantos hayamos visto: ni una sola vez miró a los ojos a su bella esposa, la actricita Anahí, en plena actuación para las cámaras. Ni simulando puede ocultar la realidad pese a su cercanía, emocional también, con el mandatario federal quien tanto lo aprecia al igual que al gobernador de Puebla, Rafael Moreno Valle, igualmente señalado como presunto precandidato a la Presidencia, pero representando al PAN si lo deja Margarita, protagonista del “Regreso de la Momia”, dicho con el mayor respeto a su condición de dama pero no a la de manipuladora de conciencias de la mano de su consorte, felipe, quien ahora sí salió de la ratonera con el permiso de los sicarios. Cuánto sabes, cuánto eres.
Además, el rumor se extiende. ¿Cuánto presionan los mandos militares al ser dueños de los territorios, en apariencia, y ser quienes pueden negociar, “en paz”, con los grandes caos que los han infiltrado para poder realizar elecciones en buena parte de la República? En pocas palabras; de querer, los cárteles desatados y violentos, harían de la jornada electoral una enorme oportunidad para hacer sentir su fuerza desatando el pánico como jamás ha ocurrido aunque, estoy seguro, no pocas veces les ha pasado por la cabeza o han optado por negociar la tranquilidad a cambio de otras prebendas de elevado rango.
Fue por ello que propuse el realismo de modificar una de las consonantes que integran las siglas del INE y modificar la “ene” por la “eme”; que fuera IME y no INE con una acepción clarísima: Instituto Militar Electoral (IME), bastante más ad hoc con la realidad porque, sin duda, de no intervenir el ejército, la marina y agregados –ojalá que no usen helicópteros porque son una tentación para los sicarios criminales que juegan con ellos al tiro al blanco usando sus misiles tierra-aire-, no sería factible instalar la mitad de las mesas electorales en el país. ¿Y todo para qué? ¿Para llevar adelante una parodia más con las consiguientes protestas poselectorales destinadas a demostrar que está viva la “democracia” en México en donde se permite la parálisis urbana por respeto a las distintas fracciones partidistas?