27/02/15.- ¿Llevas ya un tiempo en tu actual empleo? Generalmente cuando el tiempo empieza a pasar y tú no sales de esa fría y obscura oficina, la rutina comienza a hacerse tu peor enemiga, pues se convierte en nada más y nada menos que una actividad para obtener un ingreso, dejando de lado la pasión por hacer lo que te gusta.
Aquí 10 “síntomas” que te ayudarán a identificar que definitivamente ya no es tu momento en ese empleo o que de plano has comenzado a odiarlo; así que toma nota:
1.- Los pequeños dramas cotidianos, ya no te parecen tan pequeños
Ya sea que la impresora se atasque, tu computadora tarde siglos en prender o simplemente no encuentres un archivo, puede ser peor que cuatro horas atorado en el tránsito.
2. De un momento a otro
Casi sin notarlo, pasaste de ser quien resolvía problemas, aportaba ideas y amaba las planificaciones, a quien hace únicamente lo que dice en el contrato y si es posible, menos.
3. Te has vuelto el “amargado” de la oficina
De ser el que organizaba las salidas a con-beber y las comidas de cumpleaños, ahora has terminado por apenas saludar a tus compañeros y sólo si los topas de frente.
4. Sales a fumar cada media hora… y tú no fumas.
5. Nada representa un reto para tu vida o profesión…
Y si algo llega a hacerlo, prefieres evitarlo a toda costa, por lo que ya olvidaste lo que se siente el emocionarse con el trabajo y la rutina se ha vuelto tu mejor amiga con tal de no hacer ningún esfuerzo.
6. Entre tus torturas
Se encuentra cualquier forma de convivencia obligada, ya sea un cumpleaños o simplemente alguna comida o junta con el jefe.
7. Aunque trabajas sentado
Te sientes físicamente agotado; además, empiezas a enfermarte, los dolores de cabeza no se hacen esperar y en general, parece que tu cuerpo se ha vencido.