Con educación atacan a pandillas y delincuencia
1/10/2016 – Jóvenes en el Valle del Río Grande, a veces se enfrentan con una gran variedad de presiones y deben hacer decisiones difíciles. Las pandillas callejeras y los criminales suelen intentar contratarlos porque ellos son fácilmente impresionables, dicen los expertos.
Peligro de los jóvenes
Los criminales no tienen como blanco a los adultos o no se fijan en la altura o en el sexo que sean, tampoco en el color, dice el jefe de Policía de la ciudad de McAllen, Víctor Rodríguez. Guadalupe Correa-Cabrera, profesora asociado de estudios de UTRGV se especializa en los estudios sobre inseguridad y dice que los criminales buscan a los muy jóvenes puesto que a esa edad son muy susceptibles además ellos consideran que tienen muy poco que perder y son más valientes pues no miden las consecuencias de sus actos. Comenta que los reclutadores suelen buscar a grupos de niños en los parques, centros comerciales y en las escuelas. Otro detalle que comenta es que los delincuentes suelen persuadir a los niños dándoles lo que no tienen o engañándolos por su curiosidad con las drogas y tratan de hacerlos dependientes. «Es un círculo vicioso. Usted necesita droga, usted necesita trabajar para ellos y es una manera de mantenerlos en la organización», dijo el jefe de policía Víctor Rodríguez, además recordó cómo se sentía cuando el escogió un camino diferente… dice que los niños con él fueron brutales. Comenta que cuando niño te dicen…- «Ah no quieres estar con nosotros, o no deseas hacer esto y te ignoran o entre ellos dicen no podemos confiar en él y te hacen sentir mal».
Testimonio
Rápidamente se recurre a las emociones del adolescente típico y muchos quieren encajar en los grupos de amigos. Rodríguez dice que su momento de lucidez pasó a la edad de 18 años cuando comenzó a trabajar en el sistema penitenciario. «Una de las primeras personas que vi en la prisión resultó ser uno de mis ex compañeros de escuela. Mientras yo estaba fuera de las barrotes de una cárcel, él estaba dentro», dijo Rodríguez. Según el funcionario, esto no está tan claro para algunos jóvenes. «Creo que lidiar con la muerte violenta es probablemente lo más impactante para algunos de nosotros. Llegas a casa… vas a casa y te dan ganas de ir a abrazar a tus hijos», admitió.
Apoyos
Hay lugares alrededor del valle, que tratan de mantener a los niños fuera de la vida criminal. Lugares como el Club de Boys and Girls, los programas después de la escuela y otros relacionados con la comunidad que son ejemplos a seguir. Se sugiere que se permita a los niños a que sean parte de un grupo con modelos de rol positivos. Para obtener más información, los padres deben llamar a los centros comunitarios locales o los organismos encargados de la ley para encontrar el programa adecuado para su hijo.
Agencias
