Nuestros Columnistas Locales
CENA DE NEGROS
Marco A. Vázquez
27/10/17
Firmas contra Egidio…
Uno de los verdugos del PRI fue, sin duda, Egidio Torre Cantú, un ex gobernador que siempre presumió no le gustaba la política, que castigó a los suyos, a los del tricolor, como pocos y lo hizo al creer que eran culpables de la muerte de su hermano lo que provocó que las estructuras partidistas se debilitaran.
Y no fue todo el daño contra el PRI, por todos lados hay sospechas, quizá huellas, de mal manejo de recursos, de presuntos desvíos, de indolencia en el combate a la delincuencia lo que causó muchos odios y rechazo de la gente cuando iban a las urnas.
No fue pulcro en el manejo del dinero, mire, primero se descubrió un presunto mal manejo en las becas, luego con las despensas, posteriormente en seguridad pública, en resumen, y nomás para que se dé una idea, la Auditoría Superior del Congreso tiene bajo observación cuentas públicas del Estado y las administraciones municipales del pasado ya que no han podido comprobar fehacientemente el uso de 20 mil millones de pesos.
Hoy no se sabe dónde ande Egidio, ha hecho apenas unas tres o cuatro apariciones públicas desde que dejó el cargo, una en el Hospital General para presuntamente visitar una nieta recién nacida, otra en un almuerzo en Monterrey y una más en San Miguel de Allende.
¿Se anda escondiendo? quién lo sabe, el próximo domingo nos daremos cuenta ya que se acerca el Gran Premio de México de Fórmula 1 y en sus tiempos de gobernador le gustaba disfrutarlos, ya nos daremos cuenta si se aparece o no.
El tema viene a colación porque uno de sus acérrimos enemigos, el ex candidato independiente a la gubernatura, Francisco Chavira, anda promoviendo un juicio político en su contra y denuncias en la Fiscalía Anticorrupción, lo acusa de todo lo habido y por haber, lo quiere ver tras las rejas.
Ignoramos la calidad moral del acusador, lo que sí sabemos es que tiene denuncias de corrupción y mal manejo en sus universidades y demandas por despidos injustificados que presuntamente se niega a liquidar con todo y que jueces ya lo condenaron a ello, sin embargo, eso no demerita ni le quita fuerza a sus actos para llevar tras las rejas a Egidio.
Astuto, Chavira busca el respaldo popular en la denuncia y anda levantando firmas en contra de Egidio, de sobra sabe que al ex gobernador, según las encuestas y producto de un mal gobierno, lo odia el 80 por ciento de Tamaulipas y la otra parte apenas lo tolera, es decir, pretende presionar a las autoridades con manifestaciones de rechazo y en eso está utilizando a ex priístas que atendiendo una venganza por el desprecio que recibieron durante seis años firman dicha petición.
Mal el cuento, la verdad es que en Tamaulipas ya no estamos como para promover o apoyar venganzas, menos para hacer culpables o inocentes a las personas por mayoría de votos o a base de firmas, es decir, si el ex candidato a gobernador quiere meter a la cárcel a Egidio lo que debería hacer es pagar con su dinero auditoría a obras o servicios que se hayan prestado de manera sospechosa, documentar sus quejas y luego presentarlas ante la autoridad.
Para desgracia nuestra el hombrecito acusador sólo tiene odio y quiere cobrar venganza, hacer sufrir a Egidio porque para nadie es un secreto que el ex gobernador lo metió a la cárcel sin que pudiera comprobarle los delitos que le achacaba, lo más triste es que quiere manipular y meter al pueblo en un tema que no le corresponde por ahora.
Es cierto, no se necesita mucho para que la gente firme en contra de Egidio, su gobierno causó mucho enojo a la población que a su juicio vio pocos resultados y está conociendo muchos excesos, lo lamentable es que ahora se quiera aprovechar esa circunstancia con fines de lucro personal, para ir avanzando en una venganza que al pueblo no le deja ningún beneficio.
¿Usted participaría en las firmas contra Egidio?, le insisto, de acuerdo a las encuestas seguramente sí pero, ojo, la verdad es que no debemos caer en la tentación de dejarnos manipular, de apoyar a una persona que pocas veces se ha visto seria en su participación política, lo que sí debemos, por obligación, es esperar a que autoridades, la Auditoría Superior del Estado entre ellas, deslinden responsabilidades y exigirles que el trabajo sea pulcro en ese aspecto, después apoyar todas las acciones que se puedan hacer contra el ex gobernador pero con sustento jurídico, con actos respaldados por una Constitución y no por odios, no por venganzas.