Marco A. Vázquez
14/04/17
Bendito país…
Enojado y al borde de las lágrimas aquel anciano de la capital del Estado cerró su relato con una pregunta, “¿cómo es posible que mi hijo tenga años en la cárcel nomás porque se robó una gallina para comer y muchos políticos que han hecho más daño anden libres?”.
Desconocemos la respuesta, también ignoramos que tan real sea la versión del señor sobre el delito cometido por su hijo, de lo que sí existe certeza es de que en nuestras cárceles hay historias más inverosímiles, narraciones sobre hombres y mujeres inocentes purgando condenas de 20 o 30 años, de personas que en un accidente mataron a alguien y no tuvieron para la fianza o sus patrones se negaron a pagar daños causados y siguen encerrados.
Cierto es, fuera de las cárceles hay versiones peores, en la calle se detalla de autoridades que protegieron delincuentes, se habla sobre políticos que no hacen otra cosa que política y son más ricos que cualquiera de los grandes empresarios de nuestro país, entre otras cosas.
Obvio es que los casos descritos alientan la delincuencia, quienes cometen delitos saben que si es grande o pequeña su falla corren el mismo riesgo de quedar tras las rejas por largo tiempo y los políticos también están conscientes que no tendrán muchas oportunidades de robar y por eso se lanzan a los presupuestos como gato al bofe.
¿Qué pasa en este país que políticos tan peligrosos andan en la calle o en un puesto de poder a pesar de ser los principales culpables de nuestra pobreza, baja calidad educativa, la violencia e inseguridad mientras que mucha gente presuntamente inocente está tras las rejas?, quien lo sabe.
Lo que parece otra realidad es que el nuevo Sistema Penal Acusatorio no va por buen camino, ya se habla de personajes que han tenido que dejar las cárceles de manera sencilla, nomás porque una autoridad, un Ministerio Público en la mayoría de las veces, no quiso, no pudo o no supo cumplir con plazos establecidos por estos nuevos lineamientos.
Quizá los abogados sepan más sobre el tema, quizá sean ellos los que se deben apresurar a corregir fallas, más porque las señales hacia el pueblo no son nada buenas.
Mire, este jueves a primeras horas se escribió en casi todos los periódicos otra historia preocupante para la nación, (que raro que haya sido de madrugada y en temporada vacacional cuando nadie se ocupa de esos temas) la de un hombre que defraudó o se robó, es lo mismo aunque no de manera elegante, más de 55 millones de pesos, con extrañeza se dijo que apenas estuvo dos años en prisión y ya anda en la calle tan campante.
Le hablo del dueño de Oceanografía, una empresa ligada al anterior gobierno de la República, al de Felipe Calderón, que ganó contratos multimillonarios y en dólares para hacerle trabajos al mismo, de un hombre que presumía barcos como quien lo hace con su bicicleta, además dueño de un equipo de futbol, de Amado Yáñez.
Este personaje se fue a la calle tras pagar una fianza de 7.5 millones de pesos y haberse prestado a portar un brazalete a través del cual será monitoreado las 24 horas del día para que no abandone el país y siga acudiendo ante el juez para continuar con un par de procesos en su contra.
¿Qué tiene de diferente Yáñez a cualquier mexicano?, la respuesta es sencilla, tiene mucho dinero y amistad con políticos poderosos.
Así es este bendito país, parece empeñado en proteger a sus ricos mientras al resto de los mexicanos, a la gran mayoría, se lo lleva la tristeza, tiene que vivir el infierno de la inseguridad, violencia, y hasta el de recibir un trato de delincuente aun cuando todavía no se le haya probado nada, por eso le digo, ojalá nuestros políticos y nuestros abogados se ocupen de todo el nuevo Sistema Penal Acusatorio.
En otras cosas… Da gusto ver a Tamaulipas de pie, más grande que todos sus problemas, con las carreteras con mucho tráfico, sus centros recreativos, a pesar de la lluvia, hasta el tope, con sus playas repletas de personas que conocen lo que somos, mejor aún, que tienen la conciencia de que solo así llegaremos a la paz y tranquilidad, participando, gastando el dinero en nosotros, con nosotros y para nosotros.
Para que se dé una idea de lo que le hablo, en esta capital año con año una empresa de televisión realiza un evento que denomina San Marcazo ya que se lleva a cabo en las márgenes del río San Marcos que cruza el centro de la ciudad, el evento cuenta con el apoyo del Gobierno del Estado y del alcalde Oscar Almaraz Smer, ayer registró la presencia de más de 8 mil personas y los anteriores han sido más nutridos y lo que viene será más todavía.
En el Estado el gobierno de Francisco García Cabeza de Vaca también ha desarrollado eventos en las playas, conciertos, igual en centros recreativos, en espacios donde la gente se ha reunido con la firme intención de demostrar que somos mejores de lo que todos podemos pensar, siempre con la vigilancia de los cuerpos policiacos que hasta hoy han logrado un saldo blanco.