27/07/15.- El doctor Alejandro González Ojeda, dijo que un estudio reciente encontró que el 15 por ciento de los mexicanos padecen problemas de estreñimiento por lo que deciden tomar laxantes, sin embargo advirtió que consumirlos de manera frecuente e innecesaria es un grave problema para la salud, ya que debilitan las funciones del sistema digestivo.
“Es decir entre 18 y 20 millones de habitantes en el país padecen estreñimiento, sin embargo, hasta el 50 por ciento de la población en general usa laxantes, ya sea químicos o naturales, sin prescripción”, señaló el experto en cirugía del aparato digestivo.
El titular de Investigación Quirúrgica de la Unidad Médica de Alta Especialidad (UMAE), explicó que el estudio realizado por especialistas del centro y oriente del país, arroja que el efecto de los laxantes es nocivo siempre, sean de origen natural o sintético.
“Sucede que los pacientes, al automedicarse, acostumbran al sistema digestivo a depender de factores externos para desempeñarse adecuadamente. La persona mantiene constipación intestinal, porque su cuerpo se habitúa a la sustancia y así comienza un círculo vicioso”, indicó.
Aseguró que la principal causa del estreñimiento es una mala alimentación, pobre en fibras naturales, acompañada por el sedentarismo.
Añadió que los productos muy procesados, con alto contenido en azúcares, grasas saturadas y harinas, es decir que no dejan residuo, consumidos por una persona que no realiza ninguna clase de ejercicio, producen obesidad y, con ella, problemas intestinales.
“Personas con obesidad son quienes con mayor frecuencia refieren síntomas de tránsito colónico alterado”, informó González Ojeda respecto a que el exceso de peso es un problema de salud pública en México, de manera que el número de pacientes con estreñimiento va a la alza.
Pidió a la población consultar con un médico cualquier síntoma que afecte su sistema digestivo pero, sobre todo invitó a poner especial atención en el funcionamiento intestinal.
Recalcó que esforzarse mucho al evacuar; no hacerlo cuando menos una vez al día; así como modificación en la consistencia de las heces (generalmente con mucha dureza), son síntomas que ameritan una revisión especializada.