14/05/2016 – Se estima que en Matamoros más del 50 por ciento del equipo que utilizaron los contribuyentes para la declaración de impuestos está obsoleto, situación que generó problemas para que una buena parte de los contribuyentes pudieran presentar su obligación, y que ahora se encuentran de forma extemporánea cumpliendo con este requisito.
Isidro Vargas, presidente del Colegio de Contadores Públicos, asegura que para esta localidad la firma electrónica representó el primer obstáculo que impidió que algunos ciudadanos no pudieran presentar en tiempo y forma su declaración anual y que ahora fuera de tiempo están dialogando con la autoridad hacendaria para ver las posibilidades que hay para evitar ser requeridos por Hacienda.
Sobre ello señala: “La imposibilidad de tramitar la firma electrónica y la clave de acceso al portal fue en este proceso de declaración anual un motivo que propició que algunos contribuyentes se complicaran cumplir, por lo que de alguna manera esto les afectó en los reembolsos de cinco días”.
Explica que otra parte hubo quienes contaban solo con la contraseña al portal, y en el momento de introducir sus códigos al solicitar la firma se dieron cuenta que no la tenían, por lo que el trámite para este requisito les demoró y provocó que pasara el tiempo estimado por la ley para su declaración, señaló.
El representante de los profesionistas asegura que este proceso anual fue tan solo un ejemplo de cómo la tecnología aún sigue siendo un factor que está afectando algunos procesos hacendarios, ya que reconoce que gran parte de los contribuyentes, principalmente del Régimen de Incorporación Fiscal, carecen de equipo y software actualizado, lo que sin duda tendrá serias repercusiones en su historial fiscal.
En riesgo responsabilidad fiscal
Se estima que en México 14 millones de los 45 que existen, cuentan con software obsoleto y poco funcional ante la nueva tecnología del SAT, especialmente para lo que tiene que ver con el Java y Adobe, además de que se ha detectado que dichas versiones de no estar debidamente actualizadas, representan una puerta abierta para los haker y kracker que buscan información personal, y es que estas versiones desde el 2013 no han tenido ninguna actualización.
Esto además de que las facturas electrónicas se apoyan del PDF, lo que representa un riesgo en posibles fallas que se den en un documento que por falta de actualización y el sistema tan moderno de la autoridad hacendaria pone en desventaja a los contribuyentes sobre una situación que está prácticamente fuera de sus manos.
En este sentido Saúl Méndez, empresario proveedor de equipo de cómputo y nueva tecnología, asegura que la autoridad hacendaria cuenta con un sistema operativo muy moderno y uno de los de mayor tecnología en el mundo, sin embargo mientras esto es un acierto para dar certeza y agilidad en los trámites fiscales, al mismo tiempo resulta un problema para quienes usan equipos viejos y sin actualizar, ya que esto choca con los nuevos formatos.
Mario Alberto Hernández