01/02/16.-La ducha sirve para limpiar impurezas y células muertas que se encuentran en nuestra piel, así que trata de evitar los siguientes errores:
Agua muy caliente
Un error muy común es someter nuestra piel a aguas con temperaturas muy elevadas. El agua templada es la mejor opción, porque no reseca la dermis.
Varias duchas
Contrario a lo que se piensa ducharse más de una vez al día no es bueno. En el caso de haber sudado mucho, como es el caso cuando vamos al gimnasio, procura hacer una ducha breve.
Perfume excesivo
Utilizar productos muy perfumados puede producir alergias o dermatitis en las pieles sensibles. Cuanto más cosmético sea un producto de higiene, mayor riesgo hay de agresión a la piel.
Depilación bajo el agua
Muchas mujeres aprovechan el momento de la ducha, para rasurar el vello mientras cae el agua. Esto puede provocar irritación. Lo aconsejable es usar gel o espuma y agua templada.
Olvidar la toalla
Dejar la piel húmeda sólo está justificado en el caso de que recurramos a un aceite hidratante o nutritivo. De esta forma, podemos extenderlo sobre la piel y permitir que se seque de forma natural.
Restos de jabón
Si estamos muy apurados y nos bañamos en un 2×3 podemos correr el riesgo de no eliminar los restos de jabón y así, provocarnos una dermatitis irritativa.
Daño al cuero cabelludo.
Concentrarse en esparcir el champú en la coronilla y no en todo el cabello es un error muy frecuente. Recuerda que el acondicionador hay que repartirlo por los medios y las puntas, realizando un masaje hacia el cuero cabelludo.
Agencias