Texas afila el combate a medidas migratorias

12/11/2015 – El procurador General de Texas, Ken Paxton, artífice de la exitosa demanda contra las medidas migratorias del presidente Barack Obama advirtió que el estado sureño está «listo» para la última batalla legal sobre la regularización que se librará en el Tribunal Supremo.

Pleito legal
«Los tribunales federales ya nos han dado la razón tres veces y estamos listos para seguir defendiendo la ley frente al abuso ilegítimo por parte del Presidente de su poder ejecutivo», dijo Paxton en un comunicado. El procurador general texano se refirió así al fallo emitido el lunes por el Tribunal de Apelaciones del Circuito Quinto de Nueva Orleans, cuyos magistrados avalaron el bloqueo de dos medidas ejecutivas promulgadas por Obama y que beneficiarían a unos cinco millones de indocumentados. Se trata de la ampliación de la Acción Diferida (DACA), un programa de 2012 que desde entonces ya ha evitado la deportación de más de medio millón de jóvenes, y del programa Acción Diferida para Responsabilidad de los Padres (DAPA), que pretendía amparar a los padres de ciudadanos estadounidenses o con residencia permanente.

Bloqueo a medidas
El Tribunal de Apelaciones del Circuito Quinto, considerado uno de los más conservadores del país, mantuvo así el bloqueo que rige sobre estas medidas desde que en febrero un juez federal de Texas las suspendió a instancias de la oficina que dirige Paxton. El gobernador de Texas, Greg Abbott, quien interpuso en un primer momento la demanda cuando ejercía como procurador general, celebró la decisión e instó a Obama a «abandonar su programa ilegal de amnistía y empezar a implementar la legislación vigente». El Departamento de Justicia anunció el martes que la Casa Blanca elevará al Tribunal Supremo el bloqueo a sus medidas migratorias, algo que desde el fallo del tribunal de apelaciones le venían reclamado muchas asociaciones latinas y a favor de los inmigrantes. «El Departamento no está de acuerdo con el fallo adverso del Quinto Circuito y tiene la intención de buscar una nueva revisión de la Corte Suprema de los Estados Unidos», indicó el portavoz del Departamento de Justicia, Patrick Rodenbush.

Demanda
Tras la presentación del recurso, lo más probable es que la Corte Suprema no falle hasta junio de 2016, apenas seis meses antes de que Obama abandone la presidencia. Los demandantes son una coalición de 26 estados, en su mayoría republicanos y liderados por Texas, que sostienen que las medidas ejecutivas de Obama en inmigración son un cambio demasiado grande en la política del país como para que el presidente pueda actuar sin autorización del Congreso. Por ello, exigen que éstas se sometan primero a debate en la Cámara de Representantes y el Senado, actualmente en manos conservadoras, lo que previsiblemente evitaría su aprobación.

Agencias

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