20/07/2015 – Dallas/Agencias.- Las ventas de piñatas con la figura de Donald Trump han alcanzado gran popularidad desde que se comenzaron a elaborar hace un par de semanas en los talleres de ABC Party, negoció de un matrimonio de inmigrantes en el barrio hispano de Oak Cliff, en el suroeste de Dallas.
Como muchos inmigrantes, Elvia y Carlos de la Fuente, dueños de ABC Party, se indignaron al enterarse de los despectivos comentarios sobre la inmigración mexicana emitidos por el multimillonario, en el discurso en el que anunció su candidatura a la presidencia de Estados Unidos en junio pasado.
El suceso, sin embargo, les acarreo también una idea para su negocio de fabricación y venta de piñatas que mantiene desde hace 25 años.
Trump había irritado con sus declaraciones no sólo a ellos, sino a toda la comunidad hispana de Estados Unidos, y los De la Fuente, podían ofrecer con sus piñatas la forma de liberar o dirigir esa ira.
“Mi esposo siempre está pensando con que ideas podemos salir de las piñatas, o de lo que está sucediendo alrededor del mundo”, explicó Elvia De la Fuente. “Entonces ya después de que Donald Trump dijo esas palabras de los hispanos, pensamos okey, vamos hacer una piñata de Donald Trump”.
Fabricantes
La idea que tuvieron los De la Fuente no fue exclusiva, otros fabricantes y vendedores de piñatas en México y en otros lugares de Estados Unidos, pensaron lo mismo.
La piñata, un elemento central de diversión en muchas fiestas en México, puede también en ocasiones servir como un “saco de boxeo” para liberar la ira, al tiempo que extiende el entretenimiento.
Las piñatas de Trump fabricadas por “ABC Party” llamaron la atención de inmediato y comenzaron a venderse tan rápido como eran elaboradas en sus talleres.
Las ventas aumentaron aun más cuando periódicos y estaciones de televisión en Dallas dieron a conocer que se estaban fabricando piñatas con la figura del multimillonario empresario, que aspira ahora a la candidatura republicana a la Casa Blanca.
Las piñatas, que se venden a 65 dólares cada una, están siendo adquiridas por inmigrantes mexicanos y otros hispanos deseosos de darle una paliza a Trump, pero curiosamente, han atraído más el interés de los estadounidenses.
Clientes
“Yo pensé que la mayoría de los clientes iban a ser hispanos; claro verdad lo que dijo fue algo de los hispanos, pero algo totalmente curioso que ha sido casi puro americano (estadounidense) el que está interesado en la piñata”, comentó Elvia De la Fuente.
Los estadounidenses, explicó, no buscan estas piñatas para apalearlas, como lo hacen los hispanos. Las quieren para adornar sus negocios u oficinas, dado que Trump, por una u otra razón, es actualmente un personaje popular en Estados Unidos.
Agencias