OPTIMUS

Jorge A. Pérez

22/05/15

LA VACA AZUL

Quisiera escribir sólo de mis perros, pero a veces es necesario hablar de otros animales. Un tiempo tuve aves, pero estas no duraban mucho en casa, pues El Kalusha, en paz descanse, como pertenecía al partido verde, siempre les abría la jaula con el hocico.
Aunque debo de reconocer que nunca tuve un ave azul, pues estas gozan de cierta fama que resulta para mi imposible de poseer, pues obedecen estrategias sucias que pretenden el acarreo de simpatías mediante el uso de mentiras, denuestos y descalificaciones, casi siempre sin sustento.
Por actos así, el reino animal pierde credibilidad, pues los seres humanos nos percatamos de la falsedad, con solo escuchar sus gemidos oportunos a la hora en que algún familiar «Corre» como dicen al «otro lado», para un cargo de elección federal.
Si bien es cierto que en tiempos electorales se puede esperar de todo, también es cierto que muchos depositan sus esfuerzos en causas inútiles, pues su ambición solo alcanza para el proyecto personal y no el familiar.
Alguien se ha preguntado ¿por qué el Senador Francisco García anda tan animado? No es difícil suponer que lo que menos le importa es la candidatura de su hermano, ya que si así fuera, no andaría como vaca loca declarando en Nuevo Laredo, en Matamoros y en Tampico.
En Reynosa todos saben, por qué cuando cruza a su casa en Mission, Texas tiene que hacer largas filas de espera, pues le conocen muy bien sus antecedentes penales en los Estados Unidos y saben que nunca tendrá acceso al SENTRI, pues ningún individuo nefasto goza de confiabilidad como para que le otorguen ese tipo de anuencias.
Dicen que allá en la Zona de Santa Fe, de la capital del país, donde adquirió su departamento de lujo de varios millones de dólares, no tiene que hacer cola para entrar, pues el método de acceso es de casa inteligente, pero ese sistema no detecta delincuentes.
Por ello solo viene acá, de vez en cuando y por la necesidad de pasear sus cuernos.
Pero eso sí, cuando viene no pierde el tiempo, pues ha encontrado la manera perfecta escrita en un manual, de cómo hacer ruido mediático, de cómo ahuyentar a los demócratas y de cómo posicionarse para que sin pagar, le publiciten su marca para el año que entra.
Tal vez le surja por ahí un abogado de prestigio que con el cúmulo de grabaciones y notas periodísticas le demuestre sus actos anticipados de campaña para que de una vez por todas les deje el camino libre a los alcaldes de Nuevo Laredo y Matamoros.
Porque si él no se ha dado cuenta, muchos panistas ya se percataron de que lo que hace es ilegal, inequitativo y sobre todo perverso, lo cual le sale muy bien desde que paseaba por el centro de McAllen con misión de cristalero.
Poco tiempo le queda, en unos cuantos días el pueblo de Reynosa decidirá su futuro y eso lo tiene enfermo, más, mucho más de lo que se enfermó su hermano cuando le enseñaron las encuestas.
Alguien tendrá que irse a alguno de los ranchos que ha adquirido recientemente a enterrar los 16 millones de dólares de mamá, antes de que como dijo él, «Mi Mamá me los deje de heredar».
Los millones de dólares, las casas y los ranchos, todos son de «interés social» pues toda la sociedad tiene interés especial en saber cómo los adquirió el creador del nuevo manual del PAN denominado: LA VACA AZUL.