Que paguen de su bolsa…
27/07/2018 – ¿Se acuerda quien es su diputado federal?, no se espante, de acuerdo a estudios que se realizan cada fin de legislatura por lo menos el 80 por ciento de los entrevistados no se acuerdan por quien votaron tres años atrás.
Obviamente que las cifras son alarmantes porque significa que el ciudadano no volvió a ver ni en pintura, en tres años, a su legislador, también que nunca le preguntaron su sentir sobre las leyes que se construyeron o reformaron, menos lo tomaron en cuenta cuando de aplicar impuestos se trató, claro es, solo nos usaron en campañas políticas.
Tampoco tiene mucho que ver el color del partido, casi todos los diputados se convierten en lo mismo cuando les sonríe la fortuna y ya no requieren del voto, se creen personajes poderosos e intocables cuando no pasan de ser hombres y mujeres que viven o hacen negocios a la sombra de los presupuestos públicos.
No, los diputados tampoco saben rendirle cuentas a los ciudadanos, peor aún, a pesar de que se comprometen a ser la voz de la gente en el Congreso ni siquiera regresan a las colonias o ejidos a preguntar si se necesita presupuesto para algún proyecto y menos para que digan si son o no convenientes las leyes que tienen que votar.
Tres años estuvieron los diputados federales en su encargo, sus sueldos, contando compensaciones y hasta premios por asistencia, siempre fueron superiores a los 200 mil pesos mensuales, es más, todavía se van a ir y recibirán un bono de salida que será cercano al millón de pesos.
No, los legisladores nunca sufrieron para ganar dinero sin hacer su trabajo, se les pagaban asesores, se les daba dinero para tener casas de gestión, recibieron puntualmente los boletos de avión para ir y venir a la Ciudad de México, tuvieron seguros médicos que les permitían hasta cirugías plásticas, una peluquería, y otros lujos como comida y demás pero no, ni por eso tuvieron la idea de regresar a las colonias, ejidos y centros de población que recorrieron durante sus campañas para buscar el voto, no tuvieron la humildad de agradecerle a los ciudadanos esos tres años de vida de reyecitos que se dieron y todos los que podrán gozar luego de los negocios que hicieron utilizando el tráfico de influencias, se los entregaban de premio por sus votos o cosas muy parecidas.
Quizá la próxima legislatura sea diferente y por una razón, los diputados que van a entrar tendrán derecho a reelegirse, a buscar que la gente los apoye nuevamente con su voto para seguir gozando como jeques árabes tres años más, viviendo del presupuesto, por eso, solo por eso quizá podamos ver a los legisladores recién electos recorrer las calles por lo menos una vez al mes.
Mejor aún, la reelección y las medidas de transparencia que existen serán suficientes para decirle quienes hacen su chamba y votan las nuevas leyes o reformas pensando en su pueblo y cuales atienden más las líneas de su partido o del gobierno.
Un hecho es que esta legislatura nos fue mal, a los diputados que ganaron hace tres años se les olvidó que fue el pueblo quien los eligió y que cuando votaban o distribuían presupuestos lo debieron hacer pensando en ellos y no en sus carteras o negocios que florecían en la medida que quedan bien con quienes manejan el dinero o tienen el poder.
Viene una legislatura que, le insisto, será diferente, los partidos políticos tendrán que estar vigilando a sus legisladores para que nunca más vuelva a ocurrir que se olviden del ciudadano y menos que le facturen o utilicen dinero el pueblo para comprarse sus tintes de cabello o las muñecas de sus nietas como lo hizo la senadora de Morena, Layda Sansores, en teoría será imposible que se desaparezcan ya que el pueblo sino vuelve a verlos en tres años no va a votar por ellos.
Con Morena ya nos dimos cuenta, por lo menos en los dichos, que entendió la jugada, ayer la que será su coordinadora les anunció a los nuevos diputados que si querían lujos como un seguro de gastos médicos mayores tendrán que pagarlos de su bolsa y si, precisamente eso debe ser, pero no solo los seguros, también a sus asesores, empleados porque al final no sirven de nada porque se usa en amigos o amiguitas, es decir, le salen muy caro al pueblo y no le son útiles ni para mentarles la madre, menos para hacer una ley.
En otras cosas… El gobierno de Tamaulipas informó que se volvió a romper récord de visitantes a sus distintos destinos en las primeras 2 semanas del periodo vacacional de verano, al registrar una afluencia acumulada de 768 mil 639 personas, cifra que representa un incremento cercano a 5 por ciento respecto al mismo periodo del año 2017 cuando fueron recibidos 735 mil 764 vacacionistas.
Los datos dicen que se registró el ingreso de 146 mil 258 vehículos que transitaron por las carreteras tamaulipecas y un índice de ocupación hotelera del 53 por ciento.
En diversos destinos, principalmente los de playa, la Secretaría de Turismo implementó la estrategia Verano TAM 2018, consistente en una variedad de actividades deportivas, culturales y recreativas para incentivar el arribo de más paseantes locales, nacionales y extranjeros.
Dentro de los operativos se detalló que desde el 13 de julio las unidades del programa Ángeles Azules han brindado atención a más de 450 automovilistas en su tránsito por carreteras tamaulipecas, atendiendo desde ponchadura de neumáticos hasta fallas mecánicas en unidades motrices.
El operativo también cuenta con la presencia de más de 3 mil efectivos y elementos de diversas corporaciones estatales y federales desplegados en territorio tamaulipeco haciendo recorridos permanentes de vigilancia para el reforzamiento de seguridad en tramos carreteros.