LOS HECHOS

José I. Figueroa

13/06/17

3 bribones tras el líder perdido

Hace un buen tiempo que los liderazgos se borraron de la faz de la tierra.
Los luchadores sociales, sin más aspiración que servir al entorno, enarbolando las causas de los más necesitados, que arrastraban masas y transformaban vidas se convirtieron en una especie endémica, especialmente ausentes en la cosa política.
La ausencia de valores llevó a un discurso maniqueo respecto de los prospectos a la representación popular que van del blanco, al negro, sin escalas.
Por eso en la actualidad, por ejemplo, ANDRÉS MANUEL LÓPEZ OBRADOR, MARGARITA ZAVALA o MIGUEL ÁNGEL OSORIO CHONG, por citar tres ejemplos de los principales partidos andando la ruta de la sucesión presidencial, tienen malquerientes y adoradores que por igual los hacen ángeles o demonios.
La polémica de moda, sobre el acoso a la esposa del ex presidente FELIPE CALDERÓN en la capital del vecino estado potosino, al tenor del arranque “formal” de su precampaña el pasado fin de semana, igual polarizó opiniones.
Que si sus adversarios en la jornada interna panista le montaron el cuadro, que si tiene culpa o no en el manto de impunidad que tendió para su prima en la tragedia de la guardería ABC, que si resulta ilegal la campaña adelantada, que si esto, que si lo otro.
Seguramente doña MAGO, como “su dirigente” ANAYA y el ex gobernador MORENO VALLE tienen tantos capitales como lastres para dirimir en el proceso entre los panistas, como lo tendrán tantos personajes que se mueven en los demás membretes partidistas.
Y cada cual comerá tanto pinole como su saliva les permita, de aquí a las elecciones de julio del año entrante, mientras seguimos esperando el auténtico líder que venga a recomponer la escena nacional, bajo el estigma de estar tan lejos de Dios… y tan cerca del Tío Sam.
Muestra del dinamismo político-electoral, fuera de los personajes -cuestionado y no- que acompañaron en el templete la reciente visita del PEJE a la capital tamaulipeca, en gayola con furor desbordado igual se vieron viejas militantes y activistas del panismo más rancio doméstico, vitoreando a aquel.
Pertenecían -se entenderá en tiempo-, precisamente a uno de los grupos de base que venían preparando el camino del proyecto “zavalista” y que en Victoria capital, encabezaba la ex secretaria de Salud del Estado, LYDIA MADERO GARCÍA.
En el proceso interno que también el PRI ha iniciado en Tamaulipas para la elección de su presidente sustituto, igual se desplegaron banderas tras el anuncio de que OSCAR LUEBBERT GUTIÉRREZ entró a la puja por el cargo.
Al repaso de sus medallas en campaña, cuando ganó elecciones en escenarios adversos, con la oposición ganando, también salieron pronto quienes recordaron que igual, le tocó entregar el cargo a la oposición.
Fue él quien entregó el poder municipal en Reynosa al PAN, precisamente en el arranque de la carrera política del hoy gobernador de ese partido, entre “sospechosismos”, porque varios de sus colaboradores se quedaron en el ayuntamiento del otro partido.
Sin lugar a dudas, OSCAR es uno de los cuadros más experimentados, entre quienes se han declarado aspirantes, luego de la publicación de la convocatoria y tiene muchos bonos a favor… como también tendrá algunos en contra.
Unos y otros, de él y quienes más se acumulen, seguramente estarán en la balanza del partido, antes que uno y otro, dirigente e instituto político, se pongan a la consideración del grueso electoral en el proceso constitucional.

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